Augusto Lima ya es historia en el Unicaja. Tras siete años en la cantera cajista, a mediodía de ayer la web de La Opinión de Málaga adelantaba que el jugador brasileño y el club cajista acababan de firmar la rescisión del contrato que unía a ambas partes para la próxima temporada. Una hora y media después, el propio club anunciaba en nota de prensa lo que a esas horas ya era un secreto a voces en las redes sociales y en las principales webs especializadas en el mundo de la canasta en España, Europa e incluso sudamérica.

«El Unicaja ha extinguido el contrato que vinculaba a Augusto Lima con el club por una temporada más, por lo que a partir de hoy deja de pertenecer a la disciplina de nuestro equipo. Desde el club queremos agradecer a Augusto Lima su esfuerzo, dedicación y alegría en el trabajo diario y desearle muchos éxitos en su futuro personal y profesional», rezaba el comunicado oficial de despedida del canterano.

El adiós se produce después de 7 años en la disciplina verde. Y es que Lima llegó a Málaga en edad júnior para jugar en el equipo de esa categoría y en la Liga EBA, y desde entonces ha estado ligado al club, aunque con un pequeño paréntesis en que estuvo cedido al CB Granada en la segunda mitad de la campaña 2010/2011, en la que debutó en ACB y en Euroliga.

Lima es el último producto de la cantera que abandona Málaga sin poder triunfar con la camiseta cajista. También la última de las apuestas brasileñas que quedaban en el club. Antes de él salieron por la puerta de atrás de Los Guindos Vitor Faverani -ahora en los Boston Celtics de la NBA-, Paulao Prestes o Rafa Freire. Ayer, le tocó el turno a Augusto.

El adiós de Lima estaba cantado. El pasado mes de junio acudió al draft de la NBA para buscar un hueco en alguna franquicia de la mejor Liga del mundo. No tuvo suerte y no fue elegido por ningún equipo.

Joan Plaza comunicó a los dirigentes cajistas que no contaba con él y que se le buscara una salida, algo que coincidió casi en el tiempo con unas declaraciones del propio jugador asegurando que su etapa en Málaga había llegado a su fin y que quería nuevos retos.

Las últimas semanas, el agente del jugador y el club han negociado la posible rescisión del contrato, que desde ayer por la mañana ya es una realidad.

Lima aseguró ayer que se va triste de Málaga. «Le tengo que dar las gracias al club por todo. Han sido siete años maravillosos que infelizmente se han acabado. Creo que he vivido los mejores momentos de mi vida aquí y que siempre voy a llevar el verde en mi corazón. Málaga es mi ciudad, el verde es mi color y vaya donde vaya los voy a llevar conmigo. Tengo muy buenos recuerdos de aquí y ahora intentaré dar un paso adelante en mi carrera allá donde vaya pero siempre voy a desear lo mejor para este club porque es mi club y siempre le seguiré».

Aunque el jugador no quiso desvelar ayer cuál será su futuro, lo cierto es que el UCAM Murcia tiene un preacuerdo con el jugador. También el Caja Laboral, con problema de cupos, se ha interesado por su situación en los últimos días. La solución, en breve.