El Unicaja 2013/14 quiere apostar seguro. Le ha entregado la llave del vestuario a Joan Plaza. Apuesta sin fisuras por un entrenador con una mentalidad ganadora basada en el esfuerzo, el trabajo y la recuperación de los valores primarios. Primero, defensa. Después, baloncesto. Y, sobre el técnico, se ha construido un equipo sin grandes nombres, con jugadores que conocen ya la Liga y que han contado con la aprobación del catalán. Todo lo que se ha hecho este verano en las oficinas de Los Guindos ha contado con el beneplácito del nuevo «jefe» cajista.

Desde la contratación de Ryan Toolson, aún con los play off de la pasada ACB en juego, hasta el fichaje de Vladimir Stimac, el último cerrado por el club, se han producido los vaivenes lógicos en pleno mercado veraniego. El Unicaja, que inició junio con el deseo de realizar pocos cambios en la plantilla, tendrá la friolera de ocho caras nuevas. Sólo cinco jugadores siguen del pasado curso (Earl Calloway, Zoran Dragic, Sergi Vidal, Txemi Urtasun y Fran Vázquez), y finalmente se ha compuesto un plantel con 13 hombres, en el que Domas Sabonis tiene dorsal y un puesto seguro, con seis exteriores.

A priori, éste debe ser el año en el que se rompa la tendencia a la baja del club. El Unicaja ha ido cosechando decepción tras decepción, palo tras palo, en los tres últimos cursos, donde no se han cumplido ni los objetivos ni las expectativas. Se ha elaborado un equipo muy competitivo, muy completo, que aspira a devolver la felicidad perdida al Martín Carpena. El primer síntoma de recuperación es que el club ha logrado revertir el fuerte descenso de abonados. La masa social vuelve a respaldar al equipo. Más de 6.500 abonados ya en Los Guindos. Cerca de los 7.000. Es la primera buena noticia de la pretemporada.

El equipo ha tenido las lógicas complicaciones de un club importante en verano. Con tres internacionales fuera de Málaga (Dragic, Mindaugas Kuzminskas y Stimac), Plaza ha tenido seis bajas hasta hace dos semanas, ya que Vidal y Urtasun no se han ejercitado con el grupo en toda la preparación, y Rafael Hettsheimeir llegó con problemas físicos de la selección brasileña tras el FIBA América.

Así que los resultados de pretemporada sirven para poco. Tras siete encuentros amistosos, el equipo ha ganado cinco y ha perdido dos. Las victorias llegaron frente a Joventut (dos veces) 79-71 y 83-77, Partizán (74-70), Real Madrid (66-60) y UCAM Murcia (103-85). El equipo murciano ganó al cuadro verde en otro enfrentamiento (74-81) y la segunda derrota se produjo ante el invicto Valencia (82-90).

Las sensaciones son muy positivas, porque hay mimbres con los que trabajar y mucha tarea por hacer, eso sí. El equipo tiene un margen de mejora tremendo y ahora es el momento de competir y de que la pista ponga a todos en su sitio. Plaza, durante la pretemporada, ha repartido minutos y no ha dejado ver sus cartas. Es una incógnita saber qué piezas tendrán más valor en su pizarra, especialmente en el puesto de base.

Calloway partía con cierta ventaja, pues conoce bien al técnico tras su etapa en Sevilla y sabe lo que quiere. Jayson Granger pisa fuerte, tiene hambre, se deja la piel, practica el baloncesto agresivo que quiere el técnico y los dos se repartirán minutos y protagonismo, dependiendo del encuentro y del día que cada uno tenga.

Por fuera, Plaza tiene un sinfín de opciones, ya que cuenta con seis hombres para dos puestos, aunque ni Vidal ni Urtasun están para jugar; y ayer se unió a la enfermería Ryan Toolson, con un esguince de tobillo, que le hace ser baja segura. Así que Dragic, tras su gran Eurobásket y estar más fuera que dentro, tendrá un papel protagonista en estas primeras semanas, con la ayuda de Carlos Suárez y Kuzminskas. Ambos forman una pareja de aleros altos que causa envidia en La Liga Endesa y en el Viejo Continente. Mucha madera y la polivalencia de ambos para echar una mano en la «pintura», gracias a sus centímetros. Seguro que Caner-Medley les necesita en alguna ocasión. El referente interior verde regresa a España tras su paso por el Maccabi con hambre y ganas de redención. Será clave en los esquemas de Plaza, y comparte la pintura con Fran Vázquez y otras tres caras nuevas: Rafa Hettsheimeir, Domas Sabonis y Vladimir Stimac. Tres tipos de jugadores muy diferentes que darán muchas opciones y variables a Joan Plaza.