Pocas veces en el mundo del deporte 2+2=4. Hay cientos de ejemplos de sorpresas inesperadas, de triunfos inexplicables y de fiascos gloriosos que alimentan leyendas de favoritos que nunca lo demostraron y de «pequeños» especializados en romper quinielas. Ahí está la gracia. Que no siempre ganan los mejores.

El calendario de la Liga Endesa propone esta tarde al Unicaja un partido de esos que parece imposible perderlo. Sé la osadía de mi apreciación. Por eso digo que «parece imposible», aunque en realidad piense que es «absolutamente» imposible. Y es que el visitante de esta tarde de domingo en el Martín Carpena es el peor equipo de España en lo que va de curso. El Club Baloncesto Valladolid, colista de la ACB, se presenta en el Palacio con dos victorias en 14 jornadas, sin saber lo que es ganar fuera de su pista, con cambios continuos en su plantel de jugadores, con problemas serios económicos y de viabilidad del club a corto y medio plazo, sin patrocinador, sin un solo referente en su plantilla capaz de inquietar a la defensa o el ataque verde... En definitiva, que estamos ante el rival más asequible que se han encontrado los de Plaza desde que arrancó este frenesí de partidos a primeros del pasado mes de octubre. Y eso la verdad es que se agradece.

No es cuestión de menospreciar al contrario. Es solo constatar la realidad de dos equipos que viven universos opuestos en lo deportivo, en lo humano y en lo económico. Ricard Casas, desde luego, tiene por delante un reto tan apasionante como el que pueda tener el mismísimo Pablo Laso con su Real Madrid. Y es que no sé qué tendría más mérito: si Casas salvando al Valladolid de caer a la LEB Oro o Laso haciendo triplete con Liga, Copa del Rey y Euroliga.

Poco descanso desde Estambul

El caso es que al Unicaja le llega esta cita en un momento ideal. El equipo regresó ayer al mediodía de Turquía y saltará hoy al parqué casi sin tiempo para haber descansado o haber preparado a conciencia lo de esta tarde. Por eso se agradece que después de tantos rivales de postín las últimas semanas al otro lado de la pista, hoy se rebaje el nivel de exigencia en busca de un nuevo triunfo liguero.

El equipo de Joan Plaza buscará sumar la décima victoria de la temporada y además un buen saco de puntos a favor que mejore el average actual del equipo -ahora mismo de 65 puntos- por si al final de la primera vuelta algún empate se tiene que decidir por la diferencia de puntos.

Los verdes, tras su triunfo del viernes en la cancha del Efes, parecen haber encontrado cierto equilibrio en sus biorritmos. No es que el baloncesto que juegan los de Plaza sea de primer nivel, pero hay mucho trabajo colectivo, ganas de seguir sumando y jugadores que se van subiendo al carro. El último, sin ir más lejos, Ryan Toolson, que lleva un par de partidos en los que ha demostrado que puede ser el tirador que fue en Las Palmas. Con él a este nivel la verdad es que parece todo mucho más fácil.

La cita es a las seis de la tarde. No hay televisión ni retransmisión en internet en directo. El que quiera verlo deberá ir al Palacio. Una buena ocasión para darle calor al equipo en este último empujón antes de la Copa del Rey, que comenzará el próximo 6 de febrero. El objetivo hoy debe ser ganar por la mayor diferencia de puntos posible y mejorar el juego de los últimos partidos en casa. Ni más ni menos.