Joan Plaza, en un discreto segundo plano, asistió ayer a la final de la Copa del Rey. En un asiento en la tribuna principal vio el encuentro entre el Real Madrid y el Barcelona. Chaqueta oscura, camiseta negra y rostro serio. Están siendo días complicados y muy duros para el técnico. Las críticas se han centrado en él única y exclusivamente. Las decisiones que tomó en el transcurso del partido de cuartos de final ante el CAI y, especialmente, las excusas vertidas tras el encuentro no han sentado nada bien entre la parroquia malagueña. Ni en el seno del club ni en la afición. Ni tampoco entre los medios de comunicación, que también forman parte de la «familia verde».

Plaza ha pasado estos días con su gente de confianza y ayer ya dirigió a sus hombres. Nadie sigue entendiendo el «banquillazo» de Kuzminskas. Pero es agua pasada, pues hay un nombre propio sobre la mesa, monopolizando las conversaciones de los responsables de la entidad cajista: Ryan Toolson.

El escolta es uno de los grandes señalados tras la derrota ante el CAI. Su caso es especialmente significativo. Cuando se ha sentido cómodo, el americano ha sido realmente eficaz y decisivo. El problema es que esa versión la ha ofrecido a cuentagotas. Plaza le ha defendido públicamente a capa y espada. Es más, en la comparecencia tras la debacle copera volvió a hablar bien de él, autoculpándose de no darle los minutos necesarios, calificándole como jugador diésel. Sin embargo, el catalán no las tiene todas consigo. Ni mucho menos. Ya tenía sus dudas sobre él y éstas se han acrecentado tras la Copa.

Toolson no fue un fichaje de Plaza. Con la Liga aún inmersa en los play off, el Unicaja se movió muy rápido en el mercado y firmó al tirador del Gran Canaria, que había hecho unas eliminatorias por el título espectaculares, dejando en el camino al Laboral Kutxa.

Su contratación se produjo antes de que Plaza estampara su firma con el Unicaja. Aunque ya había conversaciones muy avanzadas con el agente del técnico, su llegada no era aún una realidad, ya que estaba en los play off de Lituania con el Zalgiris. O sea, Toolson no es un fichaje de Plaza. Y al coach hay aspectos de su juego que no le convencen, especialmente su actitud defensiva y su irregularidad.

Plaza quiere en sus equipos jugadores completos en ambos lados de la pista y Toolson sufre muchísimo defendiendo. Más allá de sus cero puntos ante el CAI, sin apenas tiros (uno de dos y otro de tres), la facilidad con la que Roll (11 puntos) anotó en el tramo final desquició al técnico verde. Si Toolson le diera en ataque lo que le quita en defensa habría incluso debate interno, pero es que por ahora -analizan los técnicos-, quita más de lo que da. Luego están sus problemas físicos y la necesidad que tiene de estar en perfecto estado físico para rendir a un buen nivel.

Por el momento, no hay ninguna decisión tomada, sólo esas dudas que son reales y están ahí. Y la única solución ahora es darle cariño, aliento y confianza, además de pedirle un plus de intensidad atrás.