Cuando hace apenas unas semanas se sentó en la sala de prensa del Carpena para anunciar su renovación en el Unicaja hasta el verano de 2016, Joan Plaza inició un interesante cambio de discurso. Conocedor ya de los recovecos de la entidad, el técnico ha emprendido su segundo año con más poder y como alma mater del proyecto. No hay más que ver que la mayor ovación de la «marea verde» en la presentación del equipo se la lleva él. Por encima de los jugadores. Plaza es más agresivo. Su mensaje cala más. Y cuando compareció recién renovado habló, sin tapujos, de hacer historia en Málaga, de tratar de rebasar los récords y registros de sus antecesores.

El techo es alto, mucho. Javier Imbroda, Bozidar Maljkovic, Sergio Scariolo y Aíto García Reneses, por ese orden, han entrenador antes que él al Unicaja. Son los cuatro técnicos que acumulan más encuentros en Málaga. Los únicos cuatro que le superan. Nombres de mucho prestigio. Tres seleccionadores nacionales más Maljkovic, el segundo técnico con más Euroligas en su vitrina de trofeos. Pues a esos poderosos nombres quiere Plaza superar en méritos en el banquillo malagueño.

Y dicho y hecho. Plaza ha necesitado una única temporada en Málaga para sacar al equipo de esa travesía por el desierto que parecía interminable, devolviéndole a la Copa del Rey, a los play off de la ACB y manteniendo la tradición de disputar el Top 16 de la Euroliga. Y en el primer mes de su segundo curso, el catalán ya ha logrado su primer récord en el club. El Unicaja jamás había ganado los cuatro primeros partidos de la temporada. Nunca, desde que Caja de Ronda y Mayoral Maristas se unieron, allá por el verano de 1992, el equipo venció en sus cuatro encuentros iniciales de la temporada. El primer reto está en el bote.

Bien es cierto, parafraseando a Sergio Scariolo, que no hay ningún equipo que luzca en su sala de trofeos el título de equipo del mes de noviembre. Pero sí que ayuda y estimula ver al Unicaja en tan buen momento. Hay muchas caras nuevas, se han ido jugadores muy importantes y han llegado otros que están en pleno proceso de adaptación. Y el Unicaja lo ha ganado absolutamente todo. Y eso que aún transmite las lógicas debilidades y carencias habituales de inicio de curso. Vaivenes, rachas buenas que contrastan con otras malas en pleno partido y carencias que hacen ver que apenas se llevan disputados cuatro encuentros oficiales. Pero el equipo gana. Y lo hace con una solvencia absoluta. Sus cuatro victorias se han producido por una media de 13,5 puntos. Gana sin pasar apuros.

Dos victorias han llegado en casa y otras dos se han producido a domicilio. El debut en la ACB frente al Morabanc Andorra se saldó con victoria por 83-69. Luego el equipo viajó a Vitoria, donde no conseguía imponerse en Liga Endesa desde que conquistó el título de la ACB en 2006. Y asaltó el Buesa Arena: 79-88.

Después llegó el estreno en la Euroliga. Vencer fuera de casa nunca es fácil. Todo lo contrario. Y sólo lo había conseguido en cuatro de sus 14 encuentros iniciales. El Unicaja dominó de cabo a rabo al Cedevita Zagreb de Jasmin Repesa y Veljko Mrsic. Vencer por 15 (63-78) a domicilio en la máxima competición continental no es baladí. Apenas tres días después, de vuelta a Málaga, el Unicaja despachó este domingo a la Bruixa d´Or Manresa por 81-65. Y de esta forma logró su cuarta victoria en sus primeros cuatro choques de este curso 2014/15, algo inédito.

Los números del Unicaja refrendan lo bien que se están haciendo las cosas. El equipo acumula una valoración media de 103,5... una barbaridad. Además, deja al equipo rival en tan sólo 61,3. Es decir, que casi dobla en la estadística más importante de todas, la de los méritos, a sus contrincantes.

Los verdes ven aro con suma facilidad, con 82,5 puntos de media. Y sólo encajan 69 por cita. Y eso que el equipo n0 está tirando bien de tres puntos, con un porcentaje de sólo el 32,5%. Su contundencia en la zona, con un Fran Vázquez espectacular (15,3 puntos, 7 rebotes y 22,3 de valoración), le permite convertir seis de cada 10 tiros de dos puntos (59,7%).

El equipo se pasa muy bien la pelota y promedia 20 asistencias por partido. Los bases lideran este apartado del juego, con Jayson Granger (4,5) y Stefan Markovic (4,3). Y ojo con Ryan Toolson, que además de tirar con mucho acierto (14,3 puntos con 65% en tiros de dos y 56,3% de tres), da por encuentro 3,5 asistencias.

Ahora, se trata de estirar todo lo posible esta racha sin obsesionarse con el récord. Esta semana hay de nuevo un doble compromiso. En Euroliga llega el viernes el Alba de Berlín al Carpena (20.45 horas). Y en Liga Endesa, el Unicaja visita el domingo (13.00 horas) al Gran Canaria en Las Palmas.