­El Darussafaka turco se ha puesto en contacto con el agente de Mindaugas Kuzminskas, el lituano Tadas Bulotas, para mostrarle su interés en que el alero del Unicaja cambie Málaga por Estambul para la próxima temporada. El incipiente equipo de la cada vez más poderosa Liga de Turquía ha ocupado la segunda plaza de su competición durante buena parte de la temporada y la derrota de este fin de semana ante el Fenerbahce de Zeljko Obradovic (51-73) le ha llevado a la tercera posición.

El club otomano ha comenzado a pensar a lo grande y llama a la puerta de Kuzminskas para la próxima temporada. Así se lo ha comunicado ya al jugador, que tiene buenas referencias del estilo de vida y de la Liga turca por compañeros de selección que han jugado en Turquía, aunque su deseo es continuar su carrera en Málaga.

El alero tiene una temporada más de contrato, una opción que el club debe ejecutar este verano. El Unicaja no ha movido ficha sobre un nuevo escenario con «Kuzma». No hay ofrecimiento en firme para tratar de renegociar su compromiso ni para ampliar esa única temporada que tiene firmada. El báltico tiene una cláusula de salida de 750.000 euros para la NBA, cifra que sube al millón de euros en caso de romper su compromiso para irse a Europa.

Ahí es donde radica uno de los principales hándicaps para el Darussafaka, que si debe abonar esa cifra no puede plantearle un contrato con grandes cifras. Su técnico, Oktay Mahmudi, tras abandonar el Efes, se hizo cargo del equipo, que quiere plantar cara a los grandes de su baloncesto y competir también en Europa.

Esta temporada se reforzó muy bien, y cuenta con una plantilla en la que destaca el NBA Jordan Farmar, además de Jamon Gordon, Lynn Greer, Gasper Vidmar, Taylor Brown o Ermal Kuqo. Kuzminskas representa para ellos ese paso adelante que quieren dar, aunque el millón de euros de cláusula es un grave inconveniente.

El lituano sigue creciendo en Málaga, donde es muy feliz y está convencido de triunfar. A los agentes del alero les gustaría revisar su contrato en Málaga y, por qué no, ampliar su vinculación, ya que desea aplazar el salto a la NBA al menos una temporada más. Hay muchos «grandes» en el baloncesto continental que le siguen la pista, dada su increíble calidad y su tremendo talento.

«Kuzma» es consciente de que su futuro le puede deparar grandes alegrías y que Joan Plaza ha sido el hombre clave en su carrera. El catalán le dio confianza en Kaunas y ahora afronta su tercer año junto a él, ya asentado en la elite. Eso no es óbice para que el alero desee tener más presencia en el equipo, más impacto en el juego, minutos y continuidad, con un rol más protagonista, algo que añora en estos momentos de su carrera deportiva a sus 25 años.