El Unicaja sigue reinando en Andalucía. Con insultante claridad, además. En Alcalá de Guadaíra, en territorio sevillano, el Unicaja derrotó con comodidad al CB Sevilla (77-62), tras una primera mitad de tanteo y un tercer cuarto fabuloso de los hombres de Joan Plaza, en el que marcaron las diferencias los "veteranos" del equipo. Fran Vázquez recogió el trofeo que acredita al Unicaja como ganador del torneo, que ha conquistado ya en 11 de sus 18 ediciones, las últimas cinco, consecutivas. Y, posteriormente, sonó el himno de Andalucía como colofón al torneo.

La salida a pista del Unicaja fue frenética. Un parcial de 6-0 para los verdes con una noticia sensacional, la presencia de Richard Hendrix. El pívot americano, con un edema óseo en la rodilla izquierda, fue capaz de jugar a un buen nivel y Plaza quiso enviar un mensaje situándolo en el cinco inicial. Plaza le rodeó de un quinteto casi novedoso, con Nedovic en el puesto de base, Jackson como escolta y Dani Díez en el puesto de escolta. Sólo había un "veterano", Carlos Suárez, que actuó siempre en el puesto de "cuatro". El equipo aprovechó la "sangre fresca" del equipo y Hendrix sacó a relucir su tremenda calidad, con 10 puntos al descanso, al que el Unicaja llegó tras sufrir muchos altibajos.

Y es que tras el 6-0 de salida, el Unicaja encajó un parcial que dejó a los sevillanos, adiestrados por Luis Casimiro, por delante: 8-14. La salida a pista de Kuzminskas revolucionó de nuevo al Unicaja, con un triple sobre el límite de posesión, una canasta de dos y un triple final desde la mediación de su propia pista: 17-16.

Después, el Unicaja mantuvo su buena línea (26-23), pero sufrió mucho más. El equipo abusó del triple, los escoltas -Jackson y Smith- perdieron demasiados balones y el Unicaja se vio muy pequeño, permitiendo rebotes en su aro. Al descanso, el partido llegó con ventaja sevillana: 33-37.

El tercer cuarto fue apoteósico. Plaza no tuvo dudas y fue a por el partido. No quiso hacer experimentos y situó un cinco de totales garantías, jugadores que ya tuvo el pasado año, conocedores de sus sistemas. A Markovic -muy sólido en la dirección-, Kuzminskas, Thomas y Fran le unió la muñeca de Smith. El americano, en un cinco más sólido, sólo tuvo que defender y mirar el aro. Cinco puntos consecutivos abrieron la lata. La cuarta falta de Balvin y Bamforth debilitaron sobremanera al Sevilla. Y la renta malagueña comenzó a a mentar vertiginosamente, de la mano de Kuzminskas y Germán Gabriel.

Del 48-42 se pasó al 52-44 y de ahí al 54-44. Al final del cuarto, ventaja: 58-47. El equipo funcionó a las mil maravillas con Alberto Díaz de base y Markovic de escolta, con una gran circulación, sin abusar del lanzamiento exterior, y buscando dentro a Will Thomas. La diferencia malagueña llegó a los 15 puntos (69-54) y al final el partido acabó en esa misma cifra: 77-62.

Buenas sensaciones las del Unicaja, tras una primera parte irregular, y una segunda muy sólida y consistente. Y un buen Richard Hendrix, que jugó con su rodilla izquierda con una protección por su edema óseo, pero que estuvo a un gran nivel y mostró su tremenda calidad.

Ficha técnica:

Unicaja: Nedovic (0), Jackson (7), Dani Díez (4), Suárez (0), Hendrix (14) -cinco inicial-, Alberto Díaz (2), Markovic (4), Jamar Smith (5), Kuzminskas (14), Will Thomas (10), Gabriel (14) y Fran Vázquez (3).

Baloncesto Sevilla: Anderson (6), Bamforth (11), Henton (2), Nachbar (12), Balvin (3) -cinco inicial-, Miljenovic (9), Alfonso Sánchez (0), Berni Rodríguez (5), Tomeu Rigo (3), Cate (0), Oriola (6) y Slokar (5).

Parciales: 16-17, 21-16, 10-25 y 15-19.

Árbitros: García Ortiz, Palomo y López Herrada. Sin eliminados por faltas personales.