La Euroliga, la mejor competición del mundo del baloncesto, arranca mañana y el Unicaja estará por decimosexta temporada. Sin la red de la Licencia A, el club debe redoblar esfuerzos. Jordi Bertomeu (Barcelona, 15 de enero de 1959) pone al club como ejemplo y le insta a mantener su plaza en el parqué.

Arranca una nueva temporada en la Euroliga, ¿con qué objetivos globales?

Ya no podemos hacer muchos cambios respecto a las anteriores porque no hay mucho margen. Lo que queremos es que la buena línea de las temporadas se confirme. Esto es, que la competición sea de un alto nivel, que el público crezca, que las televisiones vayan mejor, que tengamos una Final Four todavía mejor que la del año pasado... No podemos pensar en que cada año se pueda hacer un salto cualitativo muy grande. Lo importante es consolidar la competición, consolidar el producto. Y creo que eso lo estamos haciendo bien. Para esta temporada el crecimiento será prácticamente de un 12%.

Después de un par de temporadas con los partidos en jueves y viernes, ¿qué lectura hace el director ejecutivo de la Euroliga de esa decisión de cambiar del miércoles al viernes como día habitual de competición?

Desde el punto de vista de los datos ha sido un cambio muy positivo. Hemos tenido más público los viernes que los miércoles. También hemos tenido más audiencia en televisión. Y luego hemos tenido dos cosas que no se pueden medir. Por un lado, muchas de nuestras televisiones tienen también los derechos de la Champions League, lo que nos obligaba a jugar en horarios raros. Este conflicto ya no existe, por lo que los horarios son mejores y eso redunda en público. Y segundo, algo que para nosotros es crucial, que el viernes permite que las familias puedan ir a los pabellones y es algo que antes no pasaba porque es más complicado si al día siguiente hay que ir al colegio. En definitiva, el cambio ha sido una buena decisión y vamos a mantenerlo.

Se ha hablado mucho de que la Euroliga podría en el futuro pasar a jugarse el fin de semana. ¿Será eso posible?

Nunca se ha considerado esa opción. Se han dicho muchas cosas, se ha escrito y se ha opinado, pero los que estamos aquí, que sabemos lo que pasa, nunca hemos estudiado encima de la mesa una propuesta de jugar los fines de semana. Y en estos momentos no está en nuestros planes.

¿Está la Euroliga en la situación económica y de visibilidad mediática que Bertomeu quiere?

Está lejos de lo que yo quiero. Está mejor de lo que estaba, pero todavía lejos de lo que queremos. El límite en la economía no existe. Aunque somos la única Liga de Europa que ha ido creciendo estos últimos años y somos junto a la NBA la única competición de baloncesto en el mundo que crece, esto no quiere decir que nosotros nos conformemos con esto. Desde este punto de vista hay espacio para mejorar. Cuando hablamos de visibilidad, tenemos récords que nunca ha conseguido el baloncesto europeo, ni siquiera cuando juegan las selecciones nacionales, como es el caso de la visibilidad por televisión. Nosotros estamos en más de 200 países y esto fuera de la NBA ninguna otra competición tiene ese seguimiento. Por lo tanto, se ha hecho mucho, pero siempre se puede mejorar. Sabemos que las cosas van bien, pero no estamos conformes.

La mejora económica sí será evidente para los equipos con el nuevo reparto televisivo...

Sí. Hemos cambiado el sistema. Habrá más ingresos para los equipos por partidos ganados, lo que premiará los resultados deportivos por encima de los contratos de televisión. Pasamos de un 20% que había antes de premios para resultados a un 53% esta temporada.

Hablando de los contratos televisivos. Esta temporada acaba el acuerdo que tiene el Unicaja con Canal+. ¿Qué va a pasar?

Hay que esperar. El Unicaja está en la misma situación que el resto de equipos españoles. En España tenemos un contrato con Canal+, ETB y TV3 que finalizará en el mes de junio. Ahora hay que ver cuál es el escenario que hay para renegociar estos contratos. En estos momentos estamos viendo que hay una situación que está cambiando en el mercado televisivo español y hay que ver cuál es la mejor solución para los clubes en la Euroliga.

Se habla mucho estos últimos meses de la posibilidad de que la FIBA potencie una máxima competición europea que haría sombra a la Euroliga y que podría quitarle algunos de los equipos más importantes de Europa. ¿Preocupado por estos rumores?

Rumores ha habido y ha habido personas que han hecho de portavoces de esta situación, como el presidente de la Federación Española, José Luis Sáez. Pero en realidad lo que opinen estas personas es muy poco relevante porque no es de su incumbencia. Es algo que ellos no pueden decidir. Los únicos que pueden decidir sobre este tema son los clubes. Y los clubes ya han dicho muy claro que ellos tienen una compañía, que es la suya, que se llama Euroliga y que no quieren que otros hagan el trabajo que hacen ellos. Me parecería muy raro que los clubes en vez de controlar la competición quisieran que otros lo hicieran por ellos. Es como pensar que la ACB no quiera organizar la Liga. Me parecería absurdo. Pero lo importante de todo esto no es lo que puedan decir otros que no sean los clubes. Las opiniones de los presidentes de la federaciones no me importan. Me importa lo que los clubes quieren, cómo quieren dibujar su futuro.

El Unicaja participará en esta Euroliga 2015/2016 por primera vez en mucho tiempo por méritos solo deportivos según sus resultados de la última temporada. Ya no tiene Licencia A y juega la competición con Licencia B. Explique a los lectores de La Opinión de Málaga por qué el Unicaja ha perdido ese privilegio y sí lo tiene, por ejemplo, el Baskonia.

Porque teníamos una reglas que daban 4 Licencias A y se estableció que el campeón de la ACB y el subcampeón estuvieran también en la Euroliga. Estas reglas estaban vigentes hasta la temporada pasada, pero la ACB no estuvo nunca de acuerdo con esto y sometió a una gran presión a la Euroliga. Viendo que todos los clubes españoles estaban en contra del sistema vigente y que los clubes españoles con Licencia A no podían resolver este problema con la ACB, hubo que tomar una decisión. También hay que decir que las malas clasificaciones del Unicaja un par de años alimentaron mucho el debate. Yo siempre defendí las reglas de la Euroliga y en Málaga lo saben. Pero llegó un momento que la presión de la ACB y la mayor parte de sus clubes fue extrema. A la vista de esta situación y por no querer ser insensibles con una situación que cada año generaba un gran problema, viendo que Real Madrid, Barcelona, Baskonia y Unicaja no podían resolver el problema, tuvimos que resolverlo nosotros. Hemos tenido que pasar de 4 a 3 licencias. Y para decidir qué equipos seguían y quién la perdía pensamos que lo más justo, lo que no iba a generar ningún conflicto, era aplicar la misma regla que utilizamos 5 años atrás para dar las licencias. En ese examen, el Unicaja estaba en peor situación que los otros tres. Es la única razón por la que Málaga está fuera de la Licencia A.

Pero usted dio una rueda de prensa el 2 de febrero de 2012 en el Carpena y en aquella comparecencia dijo textualmente: «El Unicaja no pugna por una Licencia A porque ya la tiene y goza de una excelente salud»... Además, apostilló: «No vemos ningún motivo para revocar esa decisión. El rumor que circula sobre la posibilidad de que la pierda es enfundado»... ¿Qué ha pasado entonces para este cambio de 2012 a 2015? ¿La presión de la ACB?

Correcto. La presión de la ACB es la que ha llevado a este nuevo marco. Yo dije eso en un momento en el que el Unicaja no hacía buenos resultados y desde Bilbao y Valencia, principalmente, se cuestionaba esto y se pedía que se cambiara. Yo defendí en aquel momento la regla y el espíritu de la regla. Era una etapa en la que el Unicaja no lo hacía bien en la Liga -aunque siempre estaba por encima de la décima plaza, lo que era suficiente para seguir con el privilegio de la Licencia A-, pero sí lo hacía bien en la Euroliga. El Unicaja estuvo dos años al borde de esa décima plaza y eso creó un estado de opinión que dentro de la ACB se hizo insoportable. Tuvimos tantas peticiones de resolverlo que al final la ACB se ha salido con la suya. Ahora la cuarta plaza de la Euroliga se reserva para el mejor equipo en resultados deportivos de la Liga, sin contar a Barça, Real Madrid y Baskonia. Desde mi punto de vista es una situación peor para la ACB porque antes ser campeón o subcampeón te daba el pase y ahora con ser tercero o cuarto te puede valer. No me parece bueno porque no premia la competitividad para la ACB, pero si es lo que ellos perseguían, perfecto. Yo creo que hay que buscar que tus clubes luchen para ser primeros o segundos, no para ser cuartos. Fue una decisión que se tomó en un momento difícil, cuando entró el nuevo presidente, que se encontró con esto sin tener una opinión formada sobre esta cuestión, por lo que no lo responsabilizo a él, sí a los clubes. Al final el Unicaja está demostrando que por lo civil o por lo militar merece jugar la Euroliga.

Una cuestión que siempre genera dudas. ¿Habrá invitaciones para equipos españoles para jugar la Euroliga si no consiguen su clasificación por méritos deportivos?

Esto no ocurrirá nunca. Sólo podrá haber una invitación para un club de ACB si se baja de tres a dos Licencias A. No se puede defender que de 24 participantes se dé una invitación a un club español, cuando ya hay cuatro jugando la competición. Sólo habría 5 equipos ACB si uno gana la Eurocup. Es la única manera. La percepción en España es muy curiosa, se piensa que la Euroliga está en contra de los intereses de los clubes de ACB. Sin embargo, en el resto de Europa, se piensa que la Euroliga favorece a España por estar en España. Al cabo de 15 años ya nos hemos acostumbrado a esto. Pero si lo miramos con objetividad, ningún país ha tenido tantos equipos jugando la competición.

¿Y qué Euroliga veremos a partir de ahora? ¿Cómo evolucionará el tema de las licencias? ¿Habrá ascensos y descensos?

De momento no hay nada cerrado. Nosotros planteamos hace un año un modelo que es donde nosotros creemos que debe terminar, que es un modelo con ascensos y descensos, porque es lo mejor para los clubes. El futuro lo vemos en buscar un sistema piramidal donde las Ligas son abiertas y los dos últimos suben y bajan (excepto en la ACB, que es casi una Liga cerrada). Éste es el modelo que todo el mundo entiende y el que debe regir la Euroliga. Si me preguntas cuándo será esto, no puedo contestarte.

Supongo que sabrá que el Unicaja ha doblado casi sus abonados europeos respecto a la pasada campaña. Hay por encima de los 6.000 ¿Satisfecho?

Sin duda. El Unicaja para nosotros siempre ha sido un ejemplo a seguir para el resto de clubes europeos. José Carlos Gaspar ha venido a dar charlas a varios clubes europeos de cómo se hacen las cosas en Málaga. El Unicaja siempre ha sido una referencia y los años que ha pasado con malos resultados, la Euroliga los ha sufrido como si fueran propios. Que ahora vuelva a estar bien es una gran noticia.

¿Cómo son las relaciones a día de hoy entre la Euroliga y el Unicaja?

Son muy buenas porque es un club que siempre colabora, que nunca tiene un no y que cualquier cosa que se le pide es un sí. Nosotros también siempre intentamos decirles que sí cuando nos piden algo. Las relaciones no pueden ser mejores. El presidente que tienen es una persona dialogante y que busca soluciones a todos los problemas. Hace la vida fácil a los de alrededor.

Hay varios equipos que cada temporada hacen las Américas y viajan a EEUU para jugar partidos contra franquicias de la NBA. Podemos soñar que en un futuro próximo el Unicaja juegue contra un club NBA en pista americana. ¿Cómo decide esto la Euroliga? ¿Quién va y quién no va?

No hay que descartar nada. Las decisiones no tienen mucha ciencia. Los equipos que van es porque la marca es muy potente, como puede pasarle al Real Madrid, Barcelona, CSKA... o bien porque hay comunidades importantes de esos países en esos territorios. Por ejemplo, que se haya jugado en Manhattan un partido entre el Maccabi y el Armani Milán es la consecuencia de que en Manhattan hay una comunidad judía e italiana muy potentes y prácticamente había 10.000 espectadores en el partido amistoso jugado en el Madison Square Garden. Estos son los criterios y también el acuerdo con la NBA. Son los clubes de NBA los que nos piden rivales. En el futuro, de la misma manera que ha ido Partizán o Zalgiris, puede ir perfectamente el Unicaja.

¿Se lo ha pedido el Unicaja en alguna ocasión?

La verdad es que no. No he recibido ninguna petición del Unicaja para jugar un amistoso en EEUU.

Otra demanda de la afición. ¿Es viable pensar que Málaga pueda ser sede de una Final Four?

Quiero ser honesto y no crear falsas expectativas. En el tamaño de evento que es la Final Four, un pabellón con 10.000 espectadores plantea muchas dificultades. Y por tanto es muy difícil. Vitoria lleva 15 años pidiendo la Final Four y allí el problema no es el pabellón, sino las infraestructuras, algo que en Málaga no ocurriría. Fíjate el circuito que está teniendo: Moscú, Praga, París, Berlín, Madrid, Atenas, Barcelona, Londres, Milán... Un pabellón como el Carpena hace casi imposible dar cabida a un evento de este tipo. Esta conversación hace 10 años sería muy distinta. Pero en 2015 tengo que contestar así.