La Euroliga ya está aquí... ¡por fin! Dicen que lo bueno se hace esperar. Y después de cinco largos meses de ausencia, la mej0r competición europea regresa a Málaga. Será la decimosexta temporada para el Unicaja en la elite. Los últimos 15 años de forma consecutivos. Muchísimo tiempo en la elite, entre los mejores. Un tiempo maravilloso, con una Final Four en 2007 y una década en el Top 16. Ya está aquí la Euroliga y es motivo de felicidad. Para la entidad financiera, el club, el equipo y la afición. Porque en los próximos meses pasarán por el Carpena los mejores equipos del mundo fuera del universo NBA. 24 equipazos y un Grupo D, el del Unicaja, realmente peligroso. Los históricos y favoritísimos CSKA y Maccabi comandan el grupo, seguido del nuevo rico de Turquía, el Darussafaka Dogus y de los campeones de Italia (Dinamo Sassari) y Alemania (Brose Baskets). Y hoy, en el debut, aguarda el equipo de la pequeña población de Bamberg, una ciudad universitaria donde la mayor atracción es su equipo de baloncesto.

La camiseta verde y morada del Unicaja volverá a estar muy presente en Europa. Con la intención, además, de dar un pasito más al frente y acercarse o poder jugar incluso el Top 8. Aunque antes de hablar de cotas mayores urge solucionar una Fase Regular como nunca se ha visto por estos lares. La dificultad es extrema, pero este nuevo Unicaja quiere ponerse cotas altas, aspirar siempre a lo máximo.

El debut será esta temporada en Málaga. Escribir una previa del Unicaja sin mencionar a lesionados y hablar de bajas se hace realmente extraño. Pero así es. El Unicaja está al completo. Plaza tiene a sus 12 profesionales y eso siempre suma. Más rotación, más recursos, mejor para Joan Plaza y su cuerpo técnico.

Al otro lado de la pista espera un buen equipo como es el Brose. El campeón de la Bundesliga tiene un perímetro realmente poderoso, con el griego Zisis, el letón Strelnieks y el americano Wanamaker. Un trío que puede dar muchos problemas y que por dentro se apoya en la perla italiana Nicolo Melli y en los jóvenes Miller y Olaseni. En el ADN de este Brose, como en el Unicaja, destaca la juventud.

Los verdes son muy conscientes de que los estrenos son siempre duros y de que para pasar al Top 16 hay que ganar, sí o sí, al Bamberg en el Martín Carpena. A priori es evidente que el cuadro alemán está llamado a pelear por evitar las últimas plazas, con menos potencial que CSKA, Maccabi, Darussafaka y el propio Unicaja. Pero ojo, porque son mejores de lo que parecen.