La llegada de Gal Mekel a Málaga como sustituto de Stefan Markovic no va a ser fácil. La negociación a tres bandas Unicaja-Mekel-Estrella Roja sigue abierta, pero ayer no hubo los avances deseados porque el Estrella Roja, equipo con el que tiene contrato el jugador israelí, quiere sacar tajada de la operación, algo que el Unicaja no está dispuesto a asumir.

Como ayer por la mañana adelantó la web de La Opinión de Málaga, la agencia de representación del jugador, Beo Basket, ya tiene una primera propuesta formal para que Mekel sea jugador del equipo cajista hasta final de temporada.

La situación del jugador en su actual equipo no es nada buena. No cuenta para su entrenador y está casi fuera desde día a día, sobre todo ahora que Marcus Williams ha superado su sanción y ya puede jugar.

Eduardo García, presidente cajista, Carlos Jiménez, director deportivo, y Ángel Bordes, gerente, son los que están llevando directamente la operación. En los despachos de Los Guindos eran más partidarios en un principio de fichar un «temporero», pero como quiera que Markovic no volverá a las pistas hasta abril, hay que buscar un recambio de garantías y eso, con un contrato garantizado, siempre resulta más sencillo.

Entre el jugador israelí y el Unicaja hay algunas diferencias económicas que también tienen frenada la operación, pero fuentes próximas a la negociación indicaron ayer a este diario que el mayor problema ahora mismo es que el Estrella Roja quiere una compensación económica para darle la carta de libertad al jugador, algo que el Unicaja no está dispuesto a pagar. Mekel quiere venir a Málaga y eso ayuda a pensar en que entre club y jugador será fácil llegar a un acuerdo final, si es que llega esa ansiada desvinculación.

El club verde ha solicitado a los agentes de Mekel que solucionen su salida del Estrella Roja para, ya con la carta de libertad en el bolsillo, entonces sí negociar con el jugador su contrato en Málaga.

A pesar de que los rectores del club de Belgrado ayer dijeron que «no», el entorno del jugador espera que a lo largo de la jornada de hoy, o lo más tarde mañana, se pueda llegar a un acuerdo definitivo. Ahí hay una baza que juega a favor de Mekel porque su representante es Mizko Raznatovic, poderoso agente de jugadores europeo, con el que el Estrella Roja «necesita» mantener una buena relación de cara al futuro. Sin ir más lejos, Marcus Williams ha regresado al Estrella Roja estas últimas semanas, llevado allí por Raznatovic. Por eso hay confianza en que club y representante lleguen a un entente cordial.

Así las cosas, no hay que descartar que la desvinculación de Mekel pueda ser cuestión de horas y, a partir de ahí, se desencadene la operación Unicaja-Mekel. Hay que recordar que hay cierta urgencia para que el refuerzo llegue a Málaga porque el próximo lunes a las 18 horas se cierra el plazo de inscripción de jugadores para el Top 16, que arrancará el martes.

El club no deja de estudiar el mercado y hay otras tres opciones más con las que se está trabajando, pero ninguna tiene la misma fuerza que la del exbase del Maccabi.

Israelí con pasaporte polaco, Mekel es un base puro de 27 años y 1.91 metros. En los cuatro partidos de la presente Euroliga que ha disputado, ha promediado 3.8 puntos, 2.8 asistencias y 1.5 rebotes. Anoche, el jugador vio por televisión desde su domicilio en Belgrado la derrota cajista en Las Palmas.