Cuántas vueltas da la vida y cómo cambia esto del baloncesto. La pasada temporada, por estas alturas de curso, el Unicaja iba lanzado en la ACB, líder indiscutible, camino de firmar la mejor primera vuelta de su historia, con plaza fija en la Copa del Rey y ya, matemáticamente, como cabeza de serie. Justo doce meses después, todo aquello parece ya tan lejano...

El Unicaja ha dado un drástico giro en la Liga Endesa, donde está empeñado en tropezar una y otra vez. Sus números son impropios de un club de su potencial y acumula un registro con seis victorias y ocho tropiezos. Ese balance de 6-8 hace que este Unicaja de Joan Plaza sea el peor Unicaja de esta década y el segundo peor de los últimos 20 años. Cifras que dan a entender lo preocupante de la situación y la urgencia de tomar medidas, obrar cambios y reaccionar.

Sólo el Unicaja de la temporada 2003/04 tenía tras14 jornadas un balance peor que éste, con sólo cinco triunfos y nueve derrotas. Fue el curso del cambio, tras la marcha de Bozidar Maljkovic y la llegada al cargo de Paco Alonso. Pero el periplo del entrenador y exjugador del club no cuajó y llegó Sergio Scariolo en noviembre. Además, la estrella del equipo, el americano Victor Alexander, abandonó el equipo, y se fichó a Larry Lewis. En ese maremágnum, el platel pagó el mal arranque y tantos cambios. En la decimocuarta jornada de 2003/04 sólo era decimoquinto en la tabla, con el reseñado récord de 5-9.

Mitad de triunfos que hace un año. Pues sólo ese Unicaja tiene peores números que éste en la ACB en los últimos 20 años de vida del club. De hecho, éste es el peor Unicaja de la década. Cualquier referencia al pasado es sonrojante. Un sólo dato ayuda a comprender las actuales circunstancias del equipo. El Unicaja de la pasada temporada sumaba un registro de 12-2 tras 14 jornadas. Es decir, doblaba al equipo de esta campaña en su casillero de triunfos. Seis tiene ahora y 12 sumaba el año anterior.

En la primera experiencia de Joan Plaza en el banquillo malagueño, en 2013/14, acumulaba un registro de 9-5, justo el punto intermedio entre los dos últimos años. En 2012/13 tenía el Unicaja un récord de 8-6, que subía a 11-3 en 2011/12 y que era de 7-7 en 2010/11. Fue ése un año de una tremenda competitividad. Con ese balance, empatado en victorias y derrotas, el Unicaja ocupaba el puesto 12 en la clasificación. Ahora, sin embargo, con el actual registro de 6-8, el Unicaja es octavo. Y estaría incluso en posición de disputar la Copa del Rey si no fuera porque el equipo anfitrión, el Obradoiro, está fuera de los ocho mejores de la tabla.

No es ésta la primera ocasión en la que el Unicaja ha llegado a la decimocuarta jornada liguera con este balance de 6-8. Ya lo hizo en la temporada 2009/10, con Aíto García Reneses en el banquillo. El madrileño tomó mando en plaza e hizo «limpia» en la plantilla, dejando ir a Carlos Cabezas, Germán Gabriel -con contrato en vigor-, Kelati, Ndong y Marcus Haislip. Su arranque fue malo, con muchas lesiones además, y sólo pudo sumar ese 6-8.

El balance del título copero. Idéntico registro obtuvo el equipo en 2004/05, un año que marcará para siempre la historia de este Unicaja. ¿Por qué no repetir esa misma hazaña? Discurría esa misma temporada con idéntica desazón que ésta. Sergio Scariolo no encontraba la fórmula del éxito y su Unicaja, tras 14 jornadas en la ACB, sólo había ganado seis encuentros. La Copa del Rey estaba realmente complicada. El equipo era noveno y no dependía de sí mismo, aunque ese año iban los ocho primeros, ya que el torneo se disputaba en Zaragoza y el CAI ni siquiera estaba en la ACB.

Sucedió lo que ya es historia del club de Los Guindos. El Unicaja pasó por encima del Granada (101-68), ganó en la pista del Estudiantes (75-83) y necesitaba una carambola para que jugar la Copa. El Unicaja tenía que ganar al Fórum y esperar que el Tau Cerámica ganara en Sevilla, que ocupaba esa octava plaza. Y las dos premisas se cumplieron. El Tau de Dusko Ivanovic venció en San Pablo (79-87) un sábado por la tarde y el domingo por la mañana, el Unicaja hizo los deberes y cumplió con su parte: 75-64. El resto, ya es historia. El Unicaja fue luego a Zaragoza y derrotó a Alicante en cuartos, Valencia en semifinales y al Real Madrid en la gran final. ¿Por qué no esperar una reacción como la de aquella temporada?