El Unicaja busca, compara, pero sigue sin encontrar algo mejor en el mercado. La baja de Jamar Smith para, como mínimo, los dos próximos meses, ha abierto el debate en Los Guindos sobre la posibilidad de encontrar un recambio para el escolta norteamericano, aunque por ahora la balanza parece decantarse hacia seguir con lo que hay... al menos de momento.

Ayer volvió a ser un día de muchos ofrecimientos de jugadores en las oficinas del club. Tanto de escoltas como incluso de ala-pívots, pensando en una reestructuración todavía mayor de la actual plantilla, con la incorporación de un «4» que pudiera devolver a Carlos Suárez a su posición natural de alero -algo que parece complicado que ocurra, pero que es una opción que también se ha estudiado-.

El caso es que, sea un exterior o un interior, el club no está dispuesto a realizar ninguna operación que no suponga una mejora evidente sobre lo que ya hay. Y eso es muy complicado de garantizar a estas alturas del año, con un mercado que es muy limitado por mucho que haya una plaza de extracomunitario libre, lo que abre considerablemente el abanico de opciones.

Con el mercado de traspasos entre equipos de ACB cerrado desde el 31 de enero y muy pocas opciones reales de posibles fichajes en otras ligas de Europa, el mayor nicho para encontrar «algo» es ahora mismo la Liga de Desarrollo de EEUU.

En el club se sopesan pros y contras. No gusta, por ejemplo, que la entrada de un nuevo jugador lleve implícitos algunos cambios en la dinámica del grupo, con un nuevo elemento que tendría que adaptarse al club, a la ciudad, a sus compañeros y a los métodos de Joan Plaza. Demasiados inconvenientes sin la certeza, además, de que ese hipotético refuerzo fuera una ayuda real para el equipo.

Tampoco ayuda la cuestión económica. Tras realizar ya dos «esfuerzos» con las llegadas de Jack Cooley y de DeMarcus Nelson, el cajón está casi vacío. El club tiene muy limitado el presupuesto y hay muy poco dinero para acometer el posible fichaje.

Con 13 jugadores ya en nómina -contando los lesionados Markovic y Smith-, incorporar una ficha número 14 también tendría el inconveniente de que Joan Plaza se viera obligado a hacer un par de descartes de cara al play off de la Liga Endesa, ya que solo podrá inscribirse para la fase decisiva de la temporada a 12 jugadores.

Con el presidente y el gerente de viaje -llegaron anoche a Málaga del doble desplazamiento a Múnich y Barcelona-, la decisión definitiva de acudir al mercado o dejar el plantel como está deberá esperar. Hoy el equipo viaja a Turquía y presidente y entrenador tampoco tendrán mucho margen para reunirse y tratar el tema cara a cara.

Todas las fuentes del club consultadas ayer por La Opinión de Málaga ofrecieron un discurso similar: no hay fichaje... de momento. Y es que nadie se quiere pillar los dedos pensando en que aparezca de forma inesperada ese mirlo blanco que pueda hacer al club variar su planteamiento inicial.

Si hay refuerzo deberá decidirse con cierta celeridad. Y es que el próximo día 24 de febrero, a las 18 horas, acaba el plazo para inscribir jugadores para la segunda vuelta del Top 16. Si llega alguien, será antes de esa fecha. Después, no tendría ningún sentido.