El mes de abril indica el comienzo, entre bambalinas, de un nuevo curso. Tras escuchar a agentes y tener conocimientos certeros sobre el nivel de la actual plantilla, los movimientos comienzan en los despachos para comenzar a formar el embrión del equipo del próximo curso. Y eso es lo que está ocurriendo en Los Guindos en estos momentos, ya que el club se ha puesto a trabajar, a contactar con agentes y a preguntar por jugadores que interesan de cara al próximo curso.

El secretario técnico del club, Carlos Jiménez, es el que está liderando ese complejo de trabajo de recogida de datos, escrutando mercados, viendo jugadores interesantes, con el respaldo del responsable de scouting, Manolo Rubia, y con el conocimiento del consejo de administración del club, encabezado por Eduardo García, el presidente del club. Por propia iniciativa, y por primera vez desde que está dirigiendo al Unicaja en el banquillo, Joan Plaza, el entrenador verde, ha dado a un paso a un lado. Comunicó ya hace un tiempo que quería aislarse de lo que está por venir y centrarse únicamente en el trabajo deportivo con el equipo para tratar de sacar el mayor provecho a su plantilla. Su continuidad en Málaga, como informó ayer La Opinión, está muy en el aire. El técnico desea explorar nuevos retos profesionales, no contempla a día de hoy continuar en el Unicaja sin una plaza de Euroliga y el club también está cansado por una relación que, tras dos años idílicos, ha creado muchos roces en los últimos meses.

La Eurocup se ha convertido en un objetivo alcanzable para el club, que debutará en la segunda competición continental. La meta de llegar al Top 16 y luchar con hechos por el Top 8 se sustituirá por el de tratar de llegar lo más lejos posible en la Eurocup, que será mucho más competitiva de las que hemos visto ahora. Habrá grandes nombres, clubes muy poderosos de Rusia, Tuquía o la propia ACB, pero si el Unicaja se muestra con el compromiso y el nivel de los últimos años, todo es posible. Mantenerse entre los cuatro primeros de la ACB es también el trabajo a realizar, yendo de nuevo a la Copa del Rey.

El «efecto» de Braulio Medel. Existe el convencimiento de que la aportación del Banco al club seguirá siendo muy similar. Mucho más al hacerse público hace unas semanas que Braulio Medel, el presidente y gran valedor del proyecto de baloncesto como vehículo integrador, social y deportivo, con su gran trabajo de cantera con niños malagueños y los valores que transmite este deporte, va a pasar a dirigir la Fundación. El club depende de esa Fundación, y con Medel ocupando el puesto de máxima responsabilidad del organismo, existe una tranquilidad absoluta y confianza plena.

El propio Medel llegó a contar en una entrevista hace unos años a este periódico: «A veces me cuestiono si somos una Caja que tiene un equipo de baloncesto o si en realidad somos un equipo de baloncesto que tiene una Caja», dijo en tono distendido.

Habrá un presupuesto muy similar, algo más bajo, pero se podrán fichar a muy buenos jugadores. No hay que olvicar un asunto que no es baladí. El club, consciente de la importancia de este curso, ha invertido en esta temporada más que en todo el último trienio. Los refuerzos de Jack Cooley, DeMarcus Nelson y Kenny Hayes han convertido a la plantilla 2015/16 en la más cara de los últimos años. Y para la próxima temporada hay que tener en cuenta que hay ocho equipos que no juegan Euroliga y, por lo tanto, 100 jugadores que tendrán que buscar equipos en Eurocup. El Unicaja y Málaga, la solidez del club, el incalculable e impagable apoyo del Banco, la tradición de este equipo… Hay muchos factores.

Un entrenador español

Como ayer informó este periódico, la idea que tienen el Unicaja y Joan Plaza es la de no continuar juntos más allá el próximo 30 de junio. El desgaste es el culpable. En los despachos de Los Guindos no hay planes nuevos para el banquillo. La primera idea es la de esperar a que acabe el curso para sentarse a dialogar con Plaza. Sí que hay claro un asunto en el club: quiere seguir apostando por un técnico nacional. Tras la experiencia con Jasmin Repesa, se sacó como moraleja que los técnicos extranjeros, salvo que tengan mucha experiencia en ACB, no son la mejor opción.

El Unicaja no hay hecho ningún movimiento de futuro para su banquillo, no hay conversaciones ni negociaciones con ningún técnico, ya que Joan Plaza tiene contrato en vigor. Hay algún nombre que gusta, de futuro, como el de Ibon Navarro. El técnico vitoriano salvó una temporada muy dura, tanto en ACB como en Euroliga, con un equipo con muchísimos cambios, rechazó un contrato de tres años para quedarse en el cuerpo técnico del Laboral Kutxa, y fichó por el Basquet Manresa por esas tres temporadas. Su salida del equipo catalán es bastante económica. Se trata de un nombre que se ha deslizado. Joan Plaza sigue siendo el coach verde.