­El Unicaja le trasladó ayer una oferta a Oliver Lafayette, base estadounidense de 32 años y 1,88 metros, que se acaba de desvincular del Emporio Armani Milan y que se convertirá, si nada se tuerce, en el próximo base del Unicaja. Lafayette estaba, desde comienzos de verano, en la lista de candidatos para reforzar la dirección de juego del Unicaja. Pero tenía un año más de contrato con el club italiano y una cláusula de salida imposible de pagar para la economía del club malagueño.

Desde Los Guindos se buscaron otras opciones. Se tanteó a Dontaye Draper, se habló y negoció con Kevin Pangos, pero las dos operaciones quedaron aparcadas hace ya algún tiempo. Por eso, el club «tiró» de la lista de bases comunitarios que manejaba. Bo McCalebb y Ricky Hickman han estado en contacto con el equipo malagueño. Se estudiaron las dos opciones y se habló con el entorno de los dos jugadores. McCalebb no terminó de convencer por diversas cuestiones y se quedó Hickman como el jugador más interesante para ocupar el hueco dejado por Stefan Markovic.

Sin embargo, cuando comenzaron los movimientos serios por el exbase de Maccabi y Fenerbahce en el fin de semana, el Emporio Armani Milan anunció que rescindía el contrato de Oliver Lafayette. El domingo fue un día de locos y ayer lunes, más todavía. Lafayette era uno de los jugadores que ocupaba la parte alta del listado de opciones elaborado por el secretario técnico, Carlos Jiménez, y que contaba con la total aprobación de Joan Plaza.

El pasado verano ya se negoció por el base americano, nacido en Baton Rouge, de 32 años de edad y que tiene un valiosísimo pasaporte croata. Pero el dinero del Emporio Armani se lo llevó a Milán tras hacer un buen año en el Olympiacos griego. Y antes de Navidad, el Unicaja y el club italiano negociaron canjear a Lafayette por Nemanja Nedovic, ya que el serbio no se adaptó al puesto de base. Con las negociaciones muy avanzadas, el canje se paró. Ni Milán ni Jasmin Repesa no quisieron correr ese riesgo.

Sin embargo, ahora Lafayette ha quedado libre, ha recibido una importante indemnización por no continuar en el club lombardo y el Unicaja se olvidó de todo lo hecho anteriormente con otros jugadores y le presentó una oferta formal al base de 1,88 metros de altura.

Desde Milán se apuntó a este periódico que Lafayette no continúa en el equipo de Euroliga porque se busca «otro perfil de base» y que en el club todos están muy satisfechos con su rendimiento y su trabajo. Se apuntó que Oliver va a «fichar por Málaga», donde se encontrará con Joan Plaza.

El entrenador cajista tuvo a Lafayette en su etapa en el Zalgiris (2012/13) y es el base que quiere definitivamente para su equipo. Valora de él su capacidad de mando, su profesionalidad y su ética de trabajo. Y, además, su experiencia en la ACB, ya que el base militó en el curso 2013/14 en el Valencia.

Derechos Lafayette-Thomas. Y aquí es donde entra la segunda parte de la operación. Cuando Lafayette dejó Valencia y fichó por el Olympiacos, el club taronja le inscribió en el derecho de tanteo. Algo que hizo el propio Unicaja con Jayson Granger cuando supo que se iba al Efes el pasado verano o con Mindaugas Kuzminskas y Will Thomas más recientemente. Valencia tiene los derechos federativos de Lafayette en la ACB y el Unicaja posee los de Thomas, por quien el Valencia ha realizado una oferta cualificada que el cuadro cajista debe igualar o desatender antes de las 00.00 horas de mañana miércoles.

Sobre la mesa de las dos entidades y, vía telefónica, se está negociando ahora, según ha podido saber La Opinión, el canje de los derechos de ambos jugadores.

Es decir, el Unicaja renunciaría definitivamente a Will Thomas y el ala-pívot cambiaría el verde por el naranja. Y el Valencia haría lo propio, cedería los derechos de Oliver Lafayette a la entidad de Los Guindos para que pudiera jugar con el equipo malagueño. Los contactos son fluidos e incluso podría llegarse a un acuerdo pronto para no tener que agotar el plazo de este próximo miércoles.

Lafayette, que quiere venir a Málaga, ha promediado este curso en el EA7 Milan un total de 22:51 minutos por encuentro en Euroliga, con 7,3 puntos, 2 rebotes, 2,1 asistencias y 5,4 de valoración en 10 partidos. En la Eurocup ha firmado en nueve encuentros 8,4 puntos, 2,3 rebotes y 3,1 asistencias, en 24:33 minutos. En la competición italiana, el Milan de Repesa se ha proclamado campeón, con unos números de 10 puntos, 3,2 rebotes, 2,3 asistencias y 9,8 de valoración en 29 enfrentamientos, con 23:20 minutos en pista.