Kilómetro cero. El Unicaja arranca hoy un nuevo curso, un proyecto renovado e ilusionante, con mucho poderío en el juego exterior, dudas por dentro y una dirección más enfocada a correr y anotar que a repartir juego. Es el nuevo baloncesto, al que Joan Plaza trata de adaptar a su Unicaja.

En su cuarta temporada en Málaga, el técnico tiene el reto de retomar las magníficas sensaciones que irradió en sus dos primeros años y enterró una tercera campaña muy por debajo de lo esperado.

Para ello, el Unicaja ha renovado a la mitad de su plantilla, otra vez. El esqueleto del pasado curso ha mudado en otro esquema de juega. Sin Markovic en la dirección ni Kuzminskas en el puesto de «tres», Plaza ha buscado bases mucho más anotadores que el serbio y que Nelson. Con Oliver Lafayette y, especialmente, Kyle Fogg, las defensas ya no flotarán y el juego cajista será mucho más vertical. Da miedo, especialmente este Unicaja 2016/17, en el perímetro. Ha mantenido la pareja Nedovic-Smith, y eso siempre es importante. «Nedo» sabe que está ante su año de consagración en la ACB. Que si mantiene el nivel de los tres últimos meses de la pasada campaña podrá dar el salto el próximo verano a la NBA, ya con galones, y con un contrato repleto de ceros. De Smith se espera más consistencia y acierto en el tiro. Para eso ha venido también el polaco Adam Waczynski. Un perímetro realmente impresionante, al que hay que añadirle la defensa y solidez de Alberto Díaz y al «nuevo» Dani Díez.

Menos garantías ofrece el juego interior, precisamente, el punto fuerte de este Real Madrid de Pablo Laso. Con dos Ligas consecutivas en el bolsillo, los blancos quieren reeditar al Barça de los 90, que fue capaz de levantar tres ACB consecutivas. Un reto al alcance este Madrid, con un juego interior de vértigo: Felipe, Hunter, Nocioni, Thompkins (ausente hoy por el límite de extracomunitarios), Randolph y Ayón. Un verdadero escándalo... Debería ser ilegal tener a tantos buenos jugadores juntos, tanto jugón, tanto físico... tanto todo.

Pues a este Madrid de gigantes se mide hoy el Unicaja, con Dejan Musli muy mermado, Hamady N´Diaye dando la vuelta al mundo y Viny Okouo tratando de ayudar lo máximo posible. Deberá multiplicarse Jeff Brooks, que tan buenas sensaciones ha ofrecido. Y buscar su sitio, de una vez, Carlos Suárez, «cuatro» a la fuerza.

La buena noticia, al menos, es que Musli se vestirá hoy de corto. El pívot serbio pudo viajar ayer con la expedición malagueña en AVE hacia la capital de España. El talentoso jugador sigue teniendo décimas de fiebre, pero hoy espera ayudar al equipo. Le necesitará el Unicaja, que decidió inscribir finalmente a Juanjo García.

El dominicano se ganó un contrato de dos meses tras ayudar al equipo esta pretemporada en los entrenamientos. Tras disputar el Torneo Costa del Sol abandonó Málaga, pero menos de una semana después, el club le propuso firmar un contrato temporal para seguir ayudando en los entrenamientos. No se le iba a inscribir en la ACB, porque cada club sólo puede hacer 10 movimientos y no se quería gastar un cambio.

Pero las circunstancias mandan. Con Musli muy mermado y N´Diaye fuera de Málaga, al menos, hasta dentro de cinco días, lo lógico es que García dispute incluso los tres primeros partidos ligueros que abren esta Liga Endesa. Por lo tanto, el club decidió inscribirle. Y él tan contento. Hay que recordar que tras jugar cedido en Manresa, el CAI Zaragoza, su club, le rescindió el contrato. De estar sin trabajo a disputar un partido de ACB con el Unicaja en la pista del Madrid.

Del encuentro se espera que el Unicaja compita. Ésa va a ser la palabra clave en este tipo de encuentros. El caudal blanco es infinito, pero hay que exigir, al menos, que el Unicaja no baje nunca los brazos y dé la cara. Hoy comienza el curso. Que vaya bien.