El Unicaja se entrenó ayer, día de Navidad, a última hora de la tarde, con el fin de que los jugadores pudieran pasar la mayor parte de la jornada con sus respectivas familias, antes de la que fue única sesión del día, previa al viaje de hoy hasta Andorra, para jugar mañana ante el Morabanc.

A pesar de que el equipo ha tenido que trabajar en dos fechas tan señaladas como Nochebuena (por la mañana) y Navidad (por la noche), ha habido también tiempo para el relax, algo que aprovechó algún jugador de la primera plantilla para pasearse por el Centro hasta altas horas de la madrugada, la noche de Nochebuena.