El Unicaja pasa este domingo consulta en el Martín Carpena. Y no va a ser una mañana fácil. Tras la derrota contundente intersemanal en Valencia y la catarata de críticas que ha recibido el equipo desde la noche del miércoles, los verdes no pueden fallar ante una afición que está de uñas, pero que también hay que reconocer que es agradecida y se conforma con poco para mostrarle cariño a los suyos.

El calendario le hace un guiño al equipo verde esta jornada. En un día tan importante, el azar coloca al otro lado de la pista al Montakit Fuenlabrada, un rival de la zona media de la clasificación, al que le cuesta un mundo ganar fuera de su pista y que bastante hace con resistir temporada a temporada en la elite, contando con uno de los presupuestos más bajos de la categoría. Mucho mérito, desde luego, lo del "Fuenla".

O sea, que en el día de más dudas en el «unicajismo» de todo el curso, aterriza en Málaga uno de los mejores rivales posibles -por mucho que atraviese un buen momento en Liga, con cinco victorias en las últimas seis jornadas-. El calendario podía haber sido, sin duda, mucho más cruel y haber mandado esta vez a Málaga al Real Madrid, al Barcelona, al Baskonia, al Valencia Basket, al Herbalife Gran Canaria... pero por suerte viene este «Fuenla» que no dará facilidades, pero que será más asequible que cualquiera de esos «otros» que podían haber tocado en suerte para esta jornada 19 de la Liga Endesa.

El partido tiene muchas dudas previas por resolver. ¿Habrá castigo para algún jugador verde en la presentación del equipo? ¿Se llevará Joan Plaza toda la ira de la afición? ¿El palco se librará del malestar general?... Los prolegómenos serán duros. Al menos, ésa es la previsión. Pero también estoy seguro de que en el momento que el balón se lance al aire, la grada va a «morir» con los suyos. La «marea verde» está loca por llevarse una alegría y un par de buenas defensas y un par de buenos ataques van a hacer olvidar todo lo anterior y van a convertir el Carpena en una olla a presión contra el rival. Me sorprendería mucho que no fuera así.

Los que todavía ven la botella medio llena tienen razón en decir que la situación deportiva del equipo no es para tanto. De hecho, el Unicaja busca ante el «Fuenla» un triunfo en la Liga que podría incluso colocarlo quinto en la clasificación. Si además tiene amarrado el billete para la Copa del Rey y solo le falta un triunfo más en Europa para estar en cuartos de final, pues es verdad que la crisis parece más un invento que otra cosa. Lo que pasa es que son mucho peores las sensaciones e incluso las declaraciones del entorno del equipo que lo que dicen los números de Liga y Eurocup. Sobre todo porque estamos en una parte de la temporada en la que o estás a tope o te quedas sin nada. Y el equipo es evidente que no está a tope. Eso no admite debate.

Plaza cuenta para medirse a los del sur de Madrid con toda su plantilla. Todos, incluido Alen Omic, que debutará ante su afición después de haber jugado en Zaragoza y en Valencia estos últimos siete días. Ndiaye sigue en Málaga, pero se ha quedado sin ficha para poder inscribir al pívot esloveno en la Liga.

El partido será un examen muy serio para más de uno. Lafayette, por ejemplo, está en el centro de todas las críticas. Ha perdido el favor de Plaza y, si juega, será mirado con lupa por una «marea verde» un poco harta de su pérdida de protagonismo en la rotación del equipo. Smith, Fogg o Dani Díez también deberán dar un paso al frente. Si no...

En el Fuenlabrada debutará en el Carpena un viejo conocido, el brasileño Rafa Hettsheimeir, que ha llegado esta misma semana para cubrir la marcha de Moussa Diagne al Barça. Jota Cuspinera recupera para este partido al croata Marko Popovic, ausente en las dos últimas citas de su equipo por problemas musculares. Más madera para su perímetro.

La cita es a la hora habitual de los domingos por la mañana. Desde las 12.30 horas, con arbitraje de Cortés, Martínez Fernández y Mas, esperan el Montakit Fuenlabrada, el Martín Carpena y la ansiedad.