Hoy hace 10 años, el Martín Carpena y la afición cajista vivió uno de los momentos más inolvidables de su historia. El Unicaja, aquel 12 de abril de 2007, jugaba ante el Barcelona el tercer partido de la serie de cuartos de final de la Euroliga 2006/2007.

Era el partido de desempate de una eliminatoria en la que el equipo de Sergio Scariolo había ganado el primer partido (1-0) y el Barça de Dusko Ivanovic había igualado en el Palau Blaugrana (1-1). El Palacio de los Deportes se llenó hasta la bandera aquella noche de abril para tratar de vivir algo "histórico". Más de 10.000 seguidores llevaron en volandas a los suyos en un choque intenso, apasionante y emocionante.

La "marea verde" teledirigió desde la grada aquel triple inolvidable de Pepe Sánchez, a pase de Berni Rodríguez, que provocó el mayor delirio que se recuerda en el Palacio. Una canasta que valió el pase a la Final Four de Atenas -el Unicaja fue tercero en la capital griega, tras perder en semifinales conra el CSKA y ganar en el tercer y cuarto puesto al Tau Cerámica de Bozidar Maljkovic- y que provocó una fiesta inolvidable en el parqué del Carpena y en las calles de Málaga.