Belgrado se ha echado este lunes a la calle para recibir con honores de héroes a la selección nacional, que el domingo logró la medalla de plata en el Eurobasket 2017, tras perder ante Eslovenia la finalísima continental.

Una multitud se congregó ante el majestuoso palacio del gobierno de la capital serbia para tributar un homenaje a los jugadores y cuerpo técnico del equipo nacional, entre los que estaba el nuevo alero del Unicaja, Dragan Milosavljevic, fichado este verano por la escuadra verde procedente del Alba Berlín alemán.

La primera ministra de Serbia, Ana Brnabic; el ministro de la Juventud y el Deporte, Vanja Udovicic, y el alcalde de la capital, Sinisa Mali, dieron la bienvenida a los internacionales, ante el delirio de más de 20.000 seguidores. Una salva de aplausos de la multitud congregada ante la sede del Ejecutivo belgradense acompañó la presentación de cada uno de los baloncestistas. El más aplaudido fue el seleccionador, Sasha Djordjevic, un mito del deporte de la antigua Yugoslavia.

La ceremonia se convirtió en una fiesta popular con música, danza, brindis, petardos y fuegos artificiales

Milosavljevic tiene previsto viajar este miércoles hacia Málaga para incorporarse a la pretemporada del Unicaja, que el viernes comenzará de forma oficial la temporada con la disputa de la Supercopa Endesa de Gran Canaria.