Se acabó la pretemporada. Los exámenes médicos, la carga física, los entrenamientos mañana y tarde, los amistosos... Todo eso es ya desde hoy historia para la plantilla cajista. El Unicaja arranca la temporada oficial disputando la Supercopa Endesa Gran Canaria 2017.

El equipo verde tiene por delante una oportunidad de oro para iniciar a lo grande este ilusionante proyecto 2017/2018. El Valencia Basket (en la semifinal de esta tarde a las 19:30 horas) y el ganador del Herbalife Gran Canaria-Real Madrid de las 22 horas, en la hipotética final de mañana, es el camino que hay que recorrer estos dos días para que Carlos Suárez eleve al cielo canario un nuevo trofeo para el palmarés verde. Dos partidos, solo 80 minutos separan al Unicaja de la gloria. Tan cerca... y a la vez tan lejos.

La verdad es que la competición se presenta apasionante. Se puede decir a boca llena: Estamos ante la Supercopa más exigente y brillante de la historia. Y es que nunca antes los cuatro participantes habían sido campeones de «algo» la temporada anterior. El Unicaja ganó la Eurocup, el Valencia Basket gano la Liga ACB, el Real Madrid ganó la Copa del Rey y el anfitrión, Herbalife Gran Canaria, defiende corona, tras ganar la Supercopa Endesa 2016 en Vitoria. Es verdad que no están en Las Palmas ni FC Barcelona ni Baskonia y que se hace hasta rara su ausencia, pero no es menos cierto que esta Supercopa Endesa de Gran Canaria será una lucha entre cuatro campeonísimos nunca vista hasta ahora.

La competición arranca para los de Joan Plaza esta tarde. Espera en la semifinal el Valencia Basket. Será la primera vez que ambos equipos se vean las caras desde aquella mágica noche de abril en la que el Unicaja asaltó La Fonteta para ganar contra todo pronóstico la Eurocup.

Han cambiado mucho los dos equipos desde entonces. Unicaja y Valencia están llamados a ser dos de los «grandes» de esta próxima Liga y dos aspirantes a dar más de una sorpresa en la Euroliga. De momento, ambos se citan en una semifinal supercopera a la que parece que llega un puntito mejor el equipo cajista.

El Valencia se presenta hoy en Las Palmas sin el lesionado Latavius Williams, uno de sus fichajes estrella para este nuevo curso. Tampoco jugarán el francés Diot ni el internacional español, Alberto Abalde. Si a esto sumamos que Guillem Vives, Joan Sastre y Fernando San Emeterio acaban de volver del Eurobasket y que también estrenan entrenador, tras la llegada al banquillo de Txus Vidorreta, pues no parece que el rival llegue en las mejores condiciones posibles. Aunque la calidad de la plantilla naranja es incuestionable y será, seguro, un rival durísimo camino de la final supercopera de mañana, sábado.

Si en el Unicaja todas las miradas estarán puestas en el debut oficial de Ray McCallum, la gran revelación de la pretemporada, en el nuevo Valencia Basket los focos apuntan a Erick Green. El californiano llegó este verano al equipo taronja ya con dos temporadas de experiencia en Europa, tras vestir la camiseta del Montepaschi Siena en la temporada 2013-14 y el curso pasado brillar con el Olympiacos. Al igual que McCallum, Green destaca por su capacidad anotadora y por poder jugar tanto de base como de escolta. El nuevo jugador del Valencia Basket es el sexto máximo anotador de la pretemporada de la Liga Endesa con 17,3 puntos por partido. Green también tiene unos promedios de 2,3 asistencias, 1,3 rebotes, 1,3 recuperaciones y 15 de valoración por encuentro.

El reto está ahí. Ganar hoy al Valencia y estar mañana en la gran final. El premio es suculento: el único título nacional que todavía no luce en las vitrinas de Los Guindos. A ver si hay suerte...