El Unicaja ha recuperado la sintonía con su masa social. El éxito de la Eurocup, la vuelta a la Euroliga y la confección de una plantilla ilusionante, unido a un abono económico y fácil de pagar en plazos, ha devuelto la alegría y la expectación a la «marea verde», y ha colocado en 8.000 la cifra de abonados de este nuevo curso 2017/18. Málaga vuelve a vivir de cerca su equipo de baloncesto y recupera cifras de campañas de abonos de hace un lustro, tras pasar por una larga peregrinación en la que se llegó a contar con poco más de 6.000 abonados.

Había muchas ganas de ver por fin al equipo en directo. Es cierto que jugó el Torneo Costa del Sol, pero faltaban fichajes y jugadores del Eurobásket. El equipo transmitió muy buenas sensaciones en su debut del domingo en la pista del UCAM Murcia. Y, aunque era jueves, muy tarde (21.30 horas) y el rival no era atractivo, se respiraba un gran ambiente. Sin embargo, a pesar de todos estos datos positivos, con la importante subida en el número de socios del club, a la puesta de largo del Unicaja en esta temporada en casa sólo acudieron al Martín Carpena 6.515 personas. Es decir, que de los 8.000 abonados casi 1.500 decidieron quedarse en casa y ver el encuentro por la tele, en vez de en su asiento del Palacio. Y se perdieron una primera parte de escándalo, con un juego preciosista, y un Unicaja que acabó la jornada como el líder de la ACB. Algo que no ocurría desde hace dos años y medio.

Se trata de la entrada más baja en toda la historia del Palacio de los Deportes en el debut del equipo en la Liga Endesa. Nunca antes, en las 19 temporadas precedentes, había acudido tan poca gente al primer partido oficial del curso en Málaga. Y es curioso, porque este curso ha cambiado radicalmente la campaña de abonos y el «feeling» existente entre todas las partes: aficionados, club, plantilla, técnico...

El equipo, además, venía de hacer un debut en la pista del UCAM Murcia realmente bueno, ganando por 10 puntos (64-74), transmitiendo buenas sensaciones. Pero ni eso convenció a los malagueños, que en un jueves noche (muy tardío), sin fútbol como excusa, decidió quedarse en casa o llevar a cabo otro plan. O, simplemente, guardar fuerzas para madrugar y lleva a los niños al cole.

Lo cierto es que jamás en un debut casero de una campaña había ido tan poca gente a ver al Unicaja. Y eso que el pasado curso ya fue realmente preocupante, puesto que al Unicaja-Zaragoza sólo acudieron 6.768 personas. Sí es cierto que la sensación del pasado jueves en el Martín Carpena es que había al menos 7.500 personas. Y quizá sí que las hubo... pero no de pago. El Unicaja aprovechó para presentar a todos sus equipos de cantera, masculinos y femeninos, con un montón de chavales en la grada.

Sea como fuere, el Unicaja-Burgos arroja el peor dato de nunca. Empeora el de la pasada temporada, como se ha explicado ya, y también el de la anterior, cuando sólo fueron al Palacio para ver el debut ante el Fuenlabrada en la ACB 7.235 personas. Subió en 2014/15 ante el Andorra a 7.776 y llegó a su pico más bajo en 2013/14, ante el Estudiantes: 7.150.

Con anterioridad nunca se había bajado ni siquiera de los 8.000 asientos ocupados. En la tabla adjunta tienen todas las ocupaciones del Carpena desde que se abrió al público, en 1999/2000, con una ocupación de sólo 8.500. Las posteriores ampliaciones le llevaron a tener casi 11.000 personas. El jueves se verá de verdad a la afición del Unicaja. Llega el campeón de Europa, el Fenerbahce. ¡Vaya partidazo!