­ La noche del viernes fue complicada para el Unicaja. La durísima derrota en Valencia ha sido un pequeño tsunami para la plantilla y el cuerpo técnico. No se puede perder de la forma en la que se hizo en La Fuente de San Luis, en un escenario donde hace sólo seis meses se alzó la Eurocup. El Unicaja, de hecho, cosechó en Valencia la segunda derrota más abultada en sus 17 años disputando la Euroliga. Y jugó la peor primera parte de su historia en la máxima competición continental. Una actuación bochornosa, del que el entrenador, Joan Plaza, dijo tras el partido que se «esperaba» a un Valencia así y que había advertido a sus hombres. Una pena que no se tomaran las debidas precauciones. El entrenador sólo ofreció en sala de prensa un resumen del partido. Al no haber prensa malagueña en Valencia nadie le hizo ninguna pregunta.

Sólo el capitán del Unicaja, Carlos Suárez, dio ayer la cara y pidió sus más «sinceras disculpas» a los aficionados del Unicaja a través de un tuit en su cuenta en su red social. Un buen gesto del madrileño, que dijo que había sido la «peor derrota» que había vivido hasta entonces en su carrera. «La peor derrota que he vivido. No hemos estado a la altura del club. Nuestras sinceras disculpas a los aficionados #YoSoyDelUnicaja», tuiteó el jugador. No hubo después, al menos hasta la hora del cierre de la edición de este periódico, nuevos mensajes de jugadores del equipo.