La victoria del Unicaja anoche ante el Valencia Basket (74-67) le ha dado de nuevo una plaza entre los ocho mejores de la ACB. Es, justamente, octavo el equipo malagueño, que ha logrado ascender de la undécima a la octava plaza, y que ahora ya depende de sí mismo para poder estar en la Copa del Rey de Las Palmas en febrero. Los malagueños suben tres puestos en la clasificación después del triunfo de anoche en el Martín Carpena, pero aún, como dijo Joan Plaza, han de seguir «quitando piedras del camino». Y es que este sábado, con otro duelo antes el jueves con el Valencia, visita Málaga el Obradoiro. Los gallegos tienen toda la semana para preparar el encuentro, y los malagueños van a llegar exhaustos. Pero la victoria ahí debe ser innegociable para el Unicaja, ya que el Obradoiro también está metido en la lucha por esa octava plaza liguera. De conseguir el triunfo, al Unicaja ya sólo le faltarían dos partidos más para acabar con la primera vuelta liguera, ante el FC Barcelona y frente al Herbalife Gran Canaria. Dos citas que también tienen «pinta» de final, ya que hay mucho en juego en todos los aspectos, y el Unicaja no puede permitirse no estar en la Copa del Rey 2018 en Gran Canaria.