Durante la celebración de la Copa del Rey de Las Palmas 2018 habrá unos 250 malagueños desplazados hasta las Islas Afortunadas para presenciar el torneo del KO. Toda la isla de Gran Canaria, no sólo Las Palmas, respira baloncesto en estos días. Pero no sólo de básket vive el aficionado. De jueves a domingo, más allá de los partidos, hay tiempo para hacer otras muchas más cosas. Se puede hacer turismo. Gran Canaria es una isla perfecta para hacerlo. Es pequeña y en una mañana se pueden hacer escapadas para estar luego por la tarde en Las Palmas y ver los encuentros coperos. Y, por supuesto, en la propia ciudad hay un montón de lugares que visitar, sitios y zonas lúdicas y de restauración en las que hacer parada para retomar energías. La Copa es mucho más que baloncesto...

Patricia Henríquez es la persona perfecta para hacer de guía a todos los malagueños que durante estos días visten Las Palmas. Patri es la novia del «capi», de Carlos Suárez. Ella es natal de la isla y por sus poros se destila baloncesto. Su padre, Juan Antonio Henríquez, fue jugador en el Náutico de Tenerife del mítico Carmelo Cabrera. «Él jugó 10 años en Primera División y, desde pequeñita, siempre he ido a verle cuando jugaba la Copa por toda España».

Comencemos: «La ciudad tiene, básicamente, tres puntos de ocio. El turista de Málaga puede dar un paseo por la zona de la playa de Las Canteras. Desde el Auditorio Alfredo Kraus hasta la Puntilla existen muchos lugares para comer. Se pude visitar la parte de Santa Catalina, donde está el centro neurálgico del Carnaval. Y luego está el casco antiguo, la zona de Vegueta y la calle Mendizábal. Es un lugar emblemático. Nuestro casco antiguo es un pequeño tesoro, por allí se puede comer, cenar y tomar alguna copa. Por el mismo Centro está la zona de Gabinete Literario, en el entorno de la Catedral», explica Patri. «Luego está la zona del Muelle Deportivo, donde hay varios restaurantes. Lo puedes hacer en un par de días. En las tres zonas hay ambiente por la mañana y noche», apunta.

En la última Copa del Rey de Las Palmas hizo un tiempo muy raro. Patri recomienda llevarse algo de abrigo por las noches. «Mis padres están en mangas cortas por la mañana, pero cuando cae el sol sí que hay que abrigarse un poquito. Allí hay todavía más humedad que en Málaga, así que refresca».

Este fin de semana se mezcla la Copa del Rey con el Carnaval, una de las fiestas grandes de Las Palmas. «El espectáculo está montado en la zona de Santa Catalina. El sábado es la cabalgata, que es muy importante. Y después hay fiesta. Es un buen plan estar allí por la noche. Para tomar alguna copa, la zona de Vegueta y Mendizábal (casco antiguo) o Santa Catalina (Puerto) son buenas opciones».

Para los más forofos del básket, que quieran pasarse el día en la zona del Gran Canaria Arena, hay un centro comercial justo al lado. «También hay muchos restaurantes por esa zona. Y cuando acaben los partidos, justo frente al pabellón, en la avenida Fondo de Segura, se han abierto muchos bares para poder cenar. Y luego, coges un taxi y bajas a Mendizábal, donde hay bares de copas y discotecas», explica la novia del «capi».

La Copa da la oportunidad al viajero de disfrutar de las mañanas. La isla es pequeña. Con un coche de alquiler puedes hacer dos o tres excursiones desde bien temprano hasta la hora del partido. La más cerca a Las Palmas es a la zona de Tafira. «Son sólo 15 minutos. Ahora está muy verde, hubo mucha lluvia estas últimas semanas. Es una zona bonita».

Hay que tener en cuenta que Las Palmas está situada en la zona noreste de Gran Canaria. Lo que sugiere Patri es bajar hacia el sur. «Después vamos a Santa Brígida. Hay un mercadillo estupendo. Venden muchos colgantes, recuerdos, todos hechos a mano». De vuelta al coche, Patri sugiere seguir «la zona más alta de la isla por el norte, a 30 minutos de la ciudad». «La Cruz de Tejeda es preciosa. Lo recomiendo al que vaya. Luego hay que ir a Roque Nublo, que es nuestra montaña, como el Teide es a Tenerife. Ojo por esa zona. Cuidado porque las carreteras están regular».

«Al oeste de la isla se encuentra la zona de Agaete y su valle. A sólo 20 minutos de la ciudad. Se puede comer a muy buen precio. Sobre todo pescado y productos típicos». ¿Qué comer en Gran Canaria? Es otra de las grandes preguntas. Ella lo tiene claro: «Papas arrugadas con mojo picón y mojo verde, eso está claro. Mejor pescado que carne, somos una isla. Y hay que probar el gofio escaldado. Es una especie de puré hecho con trigo y caldo de pescado».

Sigamos de ruta. Ahora, al sur. «Las Dunas de Maspalomas, a 30 minutos, son las más importantes de Europa. Es una zona muy bonita de visitar, una maravilla y un icono del turismo gay. Se puede comer por la parte del Faro y el Boulevard de Meloneras, una zona muy chula con restaurantes. En esa zona hay que llevar dinero».

«Arguineguín está a 40 minutos de la ciudad. Y luego completamos la ruta en Mogán, a 45 minutos. La llaman la pequeña Venecia. Es un puerto precioso. Lleno de mercadillos. La comida es una maravilla. Vale la pena ir. Cuidado porque ahí sí que hace mucho calor a la hora de comer».

Patri da todas estas opciones para que la Copa sea algo más que baloncesto. Ella va a vivir a tope el fin de semana. «Ya le he dicho a Carlos que más les vale ganar porque yo me quedo hasta el domingo, y su madre también. Nos quedamos las dos en casa de mis padres». Ya sabes, «capi». Habrá que volverse con la Copa...