No será nada sencillo el encuentro de este viernes para el Unicaja, que recibe a un Panathinaikos que llega con un último fichaje de campanillas, el del base americano Mike James, y con todas sus opciones intactas por tratar aún de ser cuarto y tener así el factor pista a su favor en el play off del Top 8. El club griego aspira aún a acabar entre los cuatro primeros y por eso sigue invirtiendo y gastándose un montón de dinero en hacer el mejor equipo posible. De ahí, por ejemplo, su último refuerzo: Mike James.

El base americano, ex del Baskonia, ya jugó en el PAO el pasado curso, y luego dio el salto a la NBA. James fichó por Phoenix Suns pero tras 32 partidos, y a pesar de sus 10,4 puntos de media, con 3,8 asistencias y 2,8 rebotes, no continuó en la franquicia. El pasado 23 de diciembre, tras quedarse fuera de la rotación, ambas partes decidieron que lo mejor era separar sus caminos. Y así lo hicieron. James pasó casi un mes sin equipo. Encontró acomodo con un contrato temporal en los New Orleans Pelicans, donde sólo contó con cuatro partidos. La norma en la NBA le exigía, tras firmar un «contrato dual», regresar a la Liga de Desarollo. Y allí su sueldo iba a verse mermado considerablemente. Así que el Panathinaikos le ofreció un buen contrato hasta final de curso y James hizo las maletas. El estadounidense, en sus tres partidos en Euroliga, acumula en 27:21 minutos, 14,3 puntos, 2,3 rebotes y 4 asistencias,con 13,3 de valoración.

El equipo del español Xavi Pascual aspira aún a ser cabeza de serie. El Real Madrid es cuarto con 16-10 (jugó ayer en Milán un partido adelantado a la jornada), mientras que el Zalgiris es quinto (15-10) y el Panathinaikos es sexto con un registro de 14-11, al igual que el Khimki. Los griegos aún aspiran a esa cuarta posición que les daría el factor pista en el play off a cinco partidos del Top 8.