El Montakit Fuenlabrada ejerció ayer de equipo revelación de la Liga ACB en el Martín Carpena y superó a un Unicaja algo falto de chispa, en un partido igualado y con alternativas, pero en el que los del sur de Madrid llevaron casi siempre la delantera en el marcador y fueron justos merecedores del triunfo.

En un esprint final a cara o cruz, el acierto en los tiros libres de O´Leary, Smits y Popovic le valió al Montakit para contener el ansia de remontar liderada por un Nemanja Nedovic al que quizás le faltó un poquito de ayuda en ataque para obrar el milagro.

El Fuenlabrada, desde luego, demostró en Málaga por qué lleva toda la temporada codeándose con los mejores de esta Liga. Hizo un partido serio desde el primer cuarto, aprovechó sus recursos (esta temporada menos limitados que en años anteriores), supo siempre a qué jugar y se encontró con un tridente ofensivo Smits-Popovic-Eyenga, que apoyados en la magnífica dirección de Vargas, lideró la victoria de los fuenlabreños en el Carpena.

¿El Unicaja? Pues no se puede decir que hizo un mal partido, pero tampoco estuvo a gran nivel. Da la impresión que los de Plaza están algo justitos de físico a estas alturas de la temporada. Y eso es un problema serio porque queda mucha competición por delante. El esfuerzo de la Euroliga está pasando factura. Ya el viernes ante el Panathinaikos dio la sensación de que el partido se le hizo muy largo al equipo. Ayer, más o menos igual. Es evidente que faltan piernas, faltan ideas y falta velocidad, sobre todo en el tramo final, cuando casi siempre se deciden los partidos de baloncesto para uno o para otro lado.

La segunda derrota en Liga de la temporada en el Palacio compromete el objetivo cajista de acabar entre los cuatro primeros de la clasificación cuando eche el cierre esta Fase Regular. Es verdad que todavía falta un mundo, pero hay ya poquito margen de error para buscar esa ventaja de campo para el play off por el título de cuartos de final que se antoja más que necesaria para lograr el sueño de volver a estar en semifinales y, de paso, alimentar el deseo de volver a jugar la Euroliga el próximo curso.

Fue una lástima romper la buena racha de 8 victorias en los últimos 9 partidos de Liga porque aunque el Unicaja fue casi siempre a remolque en la primera parte, logró un espectacular parcial de 15-0 en el tercer cuarto y se puso 8 arriba (59-51), superando el 44-51 con el que mandaban hasta entonces los fuenlabreños. En ese momento, al equipo le faltó instinto asesino, no supo oler la sangre del rival. El «Fuenla», además, no se rindió, volvió a equilibrar el marcador y tuvo arrestos para dar el golpe de gracia en un último cuarto, en el que ya siempre los visitantes fueron por delante.

La verdad es que el Montakit jugó muy bien sus bazas en el Carpena. Los del sur de Madrid son un equipo «coñazo». Van siempre al mismo ritmo, los 40 minutos, tienen un buen equilibrio en su juego interior y exterior y, sobre todo, un entrenador que está llamando seriamente a las puertas de algún grande con su manera de entrenar y de dirigir a su equipo durante los partidos. Muy buena pinta tiene este Néstor «Che» García. No es de extrañar que lo veamos más pronto que tarde sentado en el banquillo de un equipo de la Euroliga. Tiempo al tiempo.

Otro aspecto negativo de la derrota de anoche fue el ambiente tibio del Palacio. Y es que el Carpena tampoco fue ayer el de las grandes ocasiones. No voy a poner ninguna disculpa. Ni el partido del Málaga CF en Vigo ni el día desapacible ni la hora más temprana de lo habitual... Menos de 6.700 aficionados en las gradas en un Unicaja-Montakit Fuenlabrada es una cifra ridícula para un choque entre dos equipos con pedigrí de play off, que se están jugando una plaza entre los cuatro primeros. Los que fueron al partido es verdad que apretaron como siempre, pero hubo muchas sillas vacías. Demasiadas.

Hoy toca mirar al frente. La semana ha sido bastante negativa, con dos traspiés en casa: el virtual adiós continental ante el Pao y esta derrota liguera ante un rival directo en la lucha por el play off. El calendario sigue con su exigencia. Esta semana que arranca hoy, tres partidos en 5 días. El miércoles, el Barcelona (Euroliga) en el Palacio; el viernes, el Brose de Dejan Musli en Alemania (Euroliga); y el domingo de Ramos, el Real Betis Energía Plus, en Sevilla, en la Liga Endesa. Vamos, lo ideal para descansar la mente y los cuerpos...