Luis Casimiro Palomo Cárdenas ya es, oficialmente, el nuevo entrenador del Unicaja. El técnico manchego se despidió ayer por la mañana del Herbalife Gran Canaria, en una rueda de prensa, se montó en un avión, aterrizó a las 16.00 horas en Málaga, se marchó a Los Guindos y a las 17.57 horas el club hizo oficial su fichaje por el equipo para hacerse cargo del banquillo malagueño durante las dos próximas temporadas.

El club anunció que Casimiro, «a punto de cumplir los 58 años, ha entrenado a diez equipos distintos en la ACB y podrá aportar toda su experiencia y sabiduría en los banquillos que ha ido alimentando desde la temporada 1997-98», e hizo un repaso por todos sus equipos: el TDK Manresa, el Cáceres, el Pamesa, el Lucentum Alicante, el Fuenlabrada, el Asefa Estudiantes, el Blancos de Rueda Valladolid, el Unicaja, el Baloncesto Sevilla y el Gran Canaria.

«Después de 19 temporadas en la élite del baloncesto español es el cuarto entrenador con más partidos en ACB (610), tras superar a Javier Imbroda precisamente en el primer partido de play off de esta campaña. Es el segundo, si contamos solo los entrenadores en activo, detrás de Pedro Martínez. Casimiro llega del Herbalife Gran Canaria donde ha completado un exitoso ciclo de dos temporadas en las que ha quedado campeón de la Supercopa en la 2016/17, subcampeón esta campaña y ha clasificado al equipo para la Euroliga del año que viene, tras terminar cuarto en la Liga Endesa», prosiguió el club.

Casimiro ha sido una opción prioritaria para el Unicaja desde que el club decidió, a final de curso, que Joan Plaza. El presidente de la entidad, Eduardo García, lo tuvo siempre en mente. Eso sí, el mandatario priorizó la opinión de su nuevo director deportivo, Carlos Jiménez, que pretendió incorporar al griego Fotis Katsikaris.

El manchego se llevó el gato al agua y vuelve a Málaga, como recuerda el Unicaja, en una campaña muy importante. «Casimiro vuelve ahora a continuar su relación con el Unicaja y sus aficionados, en una temporada que supone un nuevo reto en Liga Endesa y el retorno a la Eurocup», señaló el Unicaja en su comunicado.

Casimiro llega solo y sus hombres de confianza en el banquillo serán Ángel Sánchez Cañete y Boniface Ndong, al que se añadirá otro hombre de la cantera, presumiblemente, Paco Aurioles.

Ahora es el momento de comenzar a trabajar. Hay mucho por hacer y nombres propios sobre la mesa del nuevo coach verde. Media plantilla se marcha y hay que resolver las opciones que tiene el club para que algunos continúen y comenzar a estrechar el cerco sobre determinados jugadores que interesan para el futuro.

Ray McCallum, Nemanja Nedovic, James Augustine y Jeff Brooks no van a seguir en el equipo malagueño. Es decir, la columna vertebral del equipo de este curso se va. El club tiene, además, sendas opciones unilaterales que expiran el 30 de junio para ampliar un año más los contratos del escolta finlandés Sasu Salin y del polaco Adam Waczynski. Y, a partir de ahí, hay que realizar un trabajo de búsqueda para que vengan a Málaga jugadores del máximo nivel, ya que el equipo necesita un base y un escolta titulares, que aseguren muchos puntos, además de recomponer el juego interior cajista, pues sólo tienen contrato Carlos Suárez y Giorgi Shermadini, más allá de que está por ver el futuro de Viny Okouo. Dos semanas y media después de caer eliminado, con la renovación de Dani Díez como único movimiento en el plantel, toca pasar a la acción.