Es una de las preguntas del millón a estas alturas de la postemporada cajista. ¿Qué va a pasar con Adam Waczynski? ¿Renovará el Unicaja al alero polaco, con todavía un año más opcional firmado por parte del club? ¿Le dejará marchar este mismo verano la entidad cajista sin ejecutar esa cláusula de ampliación?...

En los despachos de Los Guindos saben que tienen dos semanas como máximo para decidir sobre el futuro del exterior polaco. No hay que olvidar que el 30 de junio es la fecha límite para tomar una determinación definitiva sobre la ampliación de su contrato un año más, que será muy importante en la confección de la línea exterior de la plantilla verde de cara a la próxima temporada 2018/2019, la primera con Luis Casimiro al frente del banquillo.

A día de hoy todas las opciones están abiertas. El jugador y su entorno quieren seguir en Málaga y están expectantes ante lo que pueda decidir el club cajista. Eso sí, hay cierto optimismo en que finalmente haya continuidad para Waczynski en Málaga. Podría decirse que con el paso de los días, el polaco ha aumentado el porcentaje de posibilidades de quedarse en el Unicaja, algo que sin embargo hace solo dos semanas, cuando Fotis Katsikaris estaba cerca de ser el sustituto de Joan Plaza en el banquillo verde, parecía inviable.

El pasado 23 de mayo, La Opinión de Málaga publicó la noticia de que el Unicaja había ofrecido dos años de contrato a Adam Waczynski -el que todavía le queda opcional, la 2018/2019, y uno más hasta junio de 2020-. Una oferta que solo unos días después retiró el club, una vez que cerró la renovación de Dani Díez. Oficiosamente se habló en ese momento de las dudas de la dirección deportiva cajista de volver a contar la próxima temporada con tres aleros altos en el equipo: Milosavljevic (con contrato en vigor), Dani Díez (renovado) y el propio Waczynski.

En el Unicaja creen que con dos «treses» es suficiente en la plantilla para esta próxima campaña, en la que el equipo rebajará considerablemente el número de partidos jugados, al no participar en la Euroliga. Y claro, con el serbio y el madrileño ya firmados, el futuro del polaco parecía entonces fuera de la planificación.

¿Qué es lo que ha cambiado ahora? Pues que Luis Casimiro no tiene claro si es una buena idea prescindir de un jugador como Adam y la opción que tendría el polaco de regresar a la posición de escolta, una demarcación en la que ya jugó en su etapa en el Obradoiro y que tampoco lo es extraña cuando juega con la selección de su país.

Así las cosas, el club lo que valora ahora es mantener al polaco en el equipo, con un rol distinto, pero dando continuidad a su presencia en el juego exterior verde, tras dos temporadas en Málaga a buen nivel.

Waczynski acumula en estos dos cursos en Málaga 117 partidos con la camiseta verde y esta misma temporada promedió 9 puntos, con un 46,4% en triples, 2,1 rebotes, 1 asistencia y 7,9 de valoración, con una media de 18:08 minutos sobre el parqué. Fue, de hecho, el segundo máximo anotador del Unicaja, por detrás de Nemanja Nedovic. Un valor en el juego ofensivo del que se prescindirá solo si el mercado obliga por otras operaciones paralelas que en el club se están madurando.