Los colores de la casa son fundamentales para crear los ambientes que nos interesan. Que los tonos de las paredes pueden influir en tu estado de ánimo no es nada nuevo. Pero, ¿sabías que también pueden repercutir en su valor a la hora de venderla?

Según un estudio llevado a cabo por Zillow Digs, la mayor firma inmobiliaria en línea de Estados Unidos, los colores de las paredes sí que tienen un impacto en su precio de venta. La firma estudió más de 50.000 imágenes de casas que se acababan de vender y extrajeron las siguientes conclusiones.

Los colores neutros y claros, como pueden ser los crema o beige, tuvieron en general resultados mucho mejores que el resto. Pero la empresa fue un paso más allá y confirmó que las casas que tienen la cocina pintada de amarillo ( en sus tonalidades más claras) se venden por unos 1.000 euros más que las que tienen la cocina de color blanco.

En los dormitorios, algunos tonos de verde (como el salvia) tuvieron mejores resultados que los colores oscuros, como por ejemplo el marrón. De hecho, tener tu habitación pintada de este color puede hacerte perder unos 200 euros.

En el caso de los salones, Zillow concluyó que los que estaban pintados de violeta o lavanda fueron los que mejor resultado obtuvieron. De hecho, estos tonos pueden hacerte ganar unos 900 euros más que si tu salón está pintado de gris oscuro o pizarra.