Nuestro país vecino tiene un nuevo jefe de Estado y, por consiguiente, una nueva Primera Dama, la octava de la V República francesa, que se coloca en el centro de todas las miradas para ser analizada de arriba a abajo. La compañera del socialista se ha declarado "orgullosa" de compartir la vida con el próximo presidente de Francia.

"Simplemente estoy orgullosa de acompañar al nuevo presidente de la República y siempre feliz de compartir la vida con François", transmitió Valérie Trierweiler a través de las redes sociales.

Es periodista, tiene 47 años, madre de tres hijos y ahora, Primera Dama de Francia. Tal y como publican en '¡Hola!', Valérie inició en el año 2006 un romance secreto con Hollande que no se hizo oficial hasta 4 años después. A día de hoy, viven en pareja pero sin contraer matrimonio.

No tiene una tarea fácil, es la sucesora de la cantante, actriz y ex modelo Carla Bruni, y, aunque no tiene tanto tirón mediático como ella, gracias a su profesión ejercida en la revista 'Paris Match' y en la cadena de televisión Direct 8, conoce muy bien los medios de comunicación.

Además, muchos apuntan a que ha sido ella la responsable del cambio de imagen de François Hollande, mucho más delgado que hace un año y medio. Y es que Tierweiler tiene aficiones de lo más sanas, como ir a la piscina, montar en bicicleta y acudir al gimnasio.

A Valérie también le gusta llevar una imagen cuidada y podríamos definir su estilo como clásico, sobrio y elegante. Adicta a los tonos tierra y, sobre todo, al mítico negro, la nueva Primera Dama de Francia es más de pantalones que de faldas.

Finalmente, nos aventuramos a afirmar que entre sus prendas favoritas se encuentran los maxi pañuelos anudados alrededor del cuello, así como los abrigos tipo trench.