Los padres de Justin Bieber se separaron hace años, cuando el cantante tenía muy pocos años de edad, apenas vivieron juntos Pattie Mallette y Jeremy Bieber, cuando vieron que las cosas no funcionaban entre ellos. Y es que Pattie se quedó embarazada a la edad de 17 años y Jeremy tenía 19, aún unos jovenzuelos.

Esto le causó estragos a Justin Bieber ya que no se crió en un entorno lo más familiar cercano, con un referente paterno. Sin embargo, esto no provocó que posteriormente Justin Bieber se lleve a las mil maravillas con Jeremy. La cuestión: ¿es una buena influencia Jeremy Bieber?

Al parecer la respuesta es un rotundo no en mayúsculas, ya que según informa Hollywoolife Jeremy Bieber ha sido cómplice de las "travesuras" de su hijo. El papá de Justin ha sido uno de los responsables en dejarle hacer la dichosa carrera ilegal que ha acabado con el canadiense en prisión. Hollywoodlife explica que Jeremy Bieber fue una de las personas que ayudó a bloquear la calle donde se produjo la carrera.

Y es que mientras su madre pide que el mundo rece por el alma de su hijo y que abandone finalmente el mal camino, su padre hace radicalmente todo lo contrario, incluso se ha animado a salir de fiesta con su hijo y los amigos de éste, permitiéndole hacer de todo. Sin embargo, finalmente ha tenido que estar cerca de las inmediaciones de la comisaría mientras su hijo estaba en el calabozo, esperando la salida del cantante.

Hollywoodlife también publica la opinión del psicólogo Lieberman, sobre cuál podría ser el motivo de que Jeremy Bieber se comporte de manera tan pasiva ante la actitud de su hijo y no haga nada para detenerlo: "Se debe a que Jeremy está viviendo una vida viaria a través de su hijo Justin. Jeremy quiso haber sido una estrella de rock famosa, pero al no conseguirlo se aferró en la fama de Justin", explicaba dicho psicólogo.

"Por lo que se ha hecho amigo de él, en vez de seguir con el rol de padre, para poder disfrutar del estilo de vida y de los privilegios a los que tiene acceso una estrella, además de conseguir que Justin le vea con muy buenos ojos", añade el Dr. Leiberman.

Su madre por el contrario sí se ha preocupado por él, pero no sabemos si definitivamente tomará cartas en el asunto y alejará a Justin de la influencia de su padre. Está claro que desde pequeño Justin Bieber no ha tenido un entorno de lo más corriente y después de haber ascendido a la fama tan joven, sea la explicación por la cual se comporte de este modo.

Lo que sí sabemos es que deberá cambiar si no quiere acabar como otras estrellas, pisando la comisaría, los calabozos y los juzgados día sí, día también. Además, deberá dejar de lado todas las gamberradas que dañan la imagen del canadiense, convirtiéndole en un "crío" a sus 19 años de edad.