"Cuando me aburro bebo", es la confesión que el actor Gérard Depardieu ha hecho a la revista So Film. El intérprete ha tenido unos meses de idas y venidas con la justicia debido a sus problemas con el alcohol.

Su rutina es clara: "Empiezo en casa, con champán o vino tinto antes de las 10.00. Después más champán, luego pastis (anís francés), quizá media botella. Después la comida, acompañada de dos botellas de vino. Por la tarde, champán, cerveza y otra vez pastis hacia las 17.00 para terminar la botella. Más tarde, vodka y/o whisky". Aun así, él mismo siente que no tiene ningún problema con la bebida ya que nunca "termino borracho solo un poco achispado", para el intérprete de Asterix y Obélix: "Todo lo que necesitas es una siesta de diez minutos y ya está, un poco de vino rosado y te sientes como una rosa".

Su entrevista para So Film ha dado la vuelta al mundo, y es que tras los problemas de salud que ha sufrido el actor parece extraño que afirme: "Si comienzo a beber, no bebo como una persona normal. Puedo tomarme 12, 13, 14 botellas por día pero no soy alcohólico".