La tradicional liposucción se reafirma como la técnica estética más segura y eficaz en cuanto a resultados. Este procedimiento quirúrgico, por el cual se eliminan depósitos de grasa inestéticos en determinadas áreas del cuerpo, goza hoy más que nunca de la confianza de instituciones, profesionales y pacientes.

La razón hay que buscarla en Francia. Hace escasos treinta días el Consejo de Estado de este país prohibió las técnicas de lisis adipocitaria –técnicas que queman la grasa sin extraerla físicamente– con finalidad estética (inyecciones de soluciones hipoosmolares, de productos lipolíticos, de mezclas mesoterapéuticas, carboxiterapia y láser transcutáneo sin aspiración) por "grave peligro para la salud". Asimismo, "por sospecha de peligro grave para la salud", el decreto valida los procedimientos con finalidad lipolítica utilizando agentes físicos externos, esto es, por vía percutánea, como la radiofrecuencia, ultrasonidos, ondas de choque o láser.

A diferencia de las inyecciones mencionadas, estas últimas técnicas consiguen una reestructuración de la zona tratada y no la eliminación de grandes cantidades de grasa por lo que no conllevan complicaciones para el hígado, tales como problemas de colesterol, aterosclerosis, complicaciones hepáticas o trombosis, consecuencias que sí se pueden dar en la carboxiterapia o el láser transcutáneo sin aspiración.

Precisamente, la detección de estas graves complicaciones – a las que se suman necrosis cutánea, hematomas o lesiones subcutáneas – en pacientes que se habían sometido a ciertos tratamientos estéticos, hizo saltar la alarma en el país galo hace un año, dando lugar a la elaboración del citado decreto. "Su aprobación pone de manifiesto que la técnica más segura para la salud, además de efectiva sigue siendo la liposucción", asegura el doctor Novoa, especialista en cirugía plástica, reparadora y estética. El profesional vaticina que en España no tardará en aplicarse la misma medida "en dos o tres años". Una idea que comparten desde la Sociedad Española de Medicina y Cirugía Cosmética: "(...) lo que resulta injustificable frente a nuestros pacientes es que en Perpignan la mesoterapia sea muy mala y en Gerona muy buena".

No obstante, la resolución adoptada en Francia no fue tan sencilla. Tras aprobarse el decreto en abril de 2011, el Consejo decidió dos meses después suspender provisionalmente la ejecución del mismo por considerar que "el número de efectos secundarios de cierta gravedad, en los casos analizados, era bajo y que algunas de las complicaciones pudieron deberse a condiciones inadecuadas en su aplicación".

En España existe un vacío normativo en la aplicación de estas técnicas de estética. Por ello, desde ciertos sectores solicitan que se determine quién, cómo y dónde pueden aplicarse estas técnicas, que actualmente realizan desde salones de belleza hasta clínicas de estética. Novoa señala que "es probable que la norma francesa se extienda a toda la Unión Europea".