Recuerdo de la anatomía y de la función

Los labios constituyen la pared anterior de la boca. Junto con los párpados, dan movimiento y expresión al rostro y reflejan el estado de ánimo. Nos ayudan a sobrevivir (alimentación) y a relacionarnos (habla, beso). De la respiración se ocupan las fosas nasales. Respirar por la boca puede ocasionar serios problemas de salud.

-Están formados por un armazón central de músculos. El principal es el músculo orbicular pero hay 20 músculos en la cara que se relacionan con los labios, que explican la tremenda variedad de expresiones. Hacia el exterior del músculo está la piel con folículos pilosos y hacia el interior la mucosa oral humedecida por la saliva de las glándulas salivales. Entre piel y mucosa se encuentra el borde rojo de los labios, sin folículos pilosos y sin glándulas pero con muchas terminaciones nerviosas para detectar la temperatura de un alimento o las particularidades de un beso.

Factores etiológicos y clínica

Existen en primer lugar unos factores genéticos predisponentes y factores ambientales:

-Lesiones por factores mecánicos, físicos y químicos.

-Infecciones por virus y hongos.

-Enfermedades de base inmunológica.

-Tumores benignos y malignos.

Tratamiento y prevención

-No se mordisquee y no arranque pieles. No apriete los labios. Relájelos (aprenda una técnica de relajación, como meditación).

-Proteja con una crema, nunca los humedezca con la lengua y evite alimentos muy calientes o muy fríos. No se exponga más de 15 minutos al sol sin protección.

-Evite hábitos tóxicos (tabaco, alcohol) y no use colutorios.

-Limpie con agua después de las comidas y cepille los dientes.

-Acuda al dentista periódicamente y ante cualquier infección o anomalía.

-Si necesita rellenos es preferible el ácido hialurónico de bajo peso molecular.

Conclusión

-Mantener unos labios limpios, libres de enfermedades y relajados, garantiza su belleza.