¡Ya ha llegado el calor! En solo unos días hemos tenido que sacar la ropa de verano y las madres vuelven a preguntar ¿qué protector solar me aconseja?

Ya sabéis que los fotoprotectores se clasifican en químicos y físicos. Los químicos absorben la radiación solar y la transforman en otros tipos de energía que no produce daño cutáneo y los físicos o pantallas minerales actúan como una barrera física, dispersan y reflejan la radiación lumínica que incide sobre ellos, son los menos cosméticos porque actúan como pantalla opaca. Y por último están los mixtos, mezcla de filtros químicos y físicos.

Hay que tener en cuenta:

El factor de protección solar (FPS)

El FPS es un índice que mide la capacidad protectora de un filtro frente a los efectos nocivos del sol. El número del FPS de un fotoprotector indica la relación entre el tiempo que podemos estar expuestos al sol con él antes de que aparezca el eritema solar, respecto al tiempo que tardaría en aparecer sin el fotoprotector.

Así un FPS de 30, por ejemplo, indica que con el filtro el eritema solar tardaría 30 veces más tiempo en aparecer que sin él. Dependiendo de las características de la piel del niño o adolescente usaremos un FPS; siempre superior al 15, un factor 30 a 50 es suficiente.

Cuando hablan de cremas solares "pantalla total" incurren en publicidad que podríamos catalogar como engañosa porque no existe la protección total; no existe ninguna prueba que demuestre que los factores de protección mayores a 50 presenten beneficio alguno adicional para la piel. Tampoco aplicar capas superpuestas de crema solar aumenta el factor de protección.

Resistencia al agua

Se han publicitado como resistentes al agua o ´water resistant´ si mantienen su factor de protección en la piel tras 2 inmersiones de 20 minutos y waterproof o ´impermeables´ cuando la mantienen después de 4 inmersiones de 20 minutos.

En realidad no deberían anunciarse como resistentes al agua sin más, lo que deberían revelar, de forma clara y precisa, es cuánto tiempo dura la crema en el cuerpo tras el contacto con el agua, por tanto en las etiquetas debería leerse por ejemplo: "Resistente al agua durante 40 minutos". Eso permitiría saber cuándo debemos volver a aplicar la crema.

La FDA (Food and Drug Administration de EEUU) no recomienda el uso de fotoprotectores en menores de 6 meses, por tanto a estas edades deben cubrirse con ropa. Los fotoprotectores sólo son beneficiosos si se usan de forma adecuada: aplicarlos unos 30 minutos antes de la exposición solar, en cantidad suficiente por toda la superficie expuesta y reaplicarlos cada 2 horas o bien tras actividades que puedan eliminarlos de la piel como el ejercicio intenso, tras nadar o secarse con la toalla.

¿Sirven de una temporada para otra?

Si durante el verano pasado estuvieron expuestos al sol, que es lo habitual, deben desecharse; sólo los que se han guardado en condiciones óptimas de temperatura y que no hayan caducado podrían usarse.

La Roche Posay Antheliox XL: La extrema protección UVA. Textura líquida, fácil de aplicar. Resistente al agua, arena y la transpiración. 17€

Eucerin Kids Solution:

Eucerin Kids Solution: Incorpora en su fórmula el factor de protección biológico Licocalcón A, un agente activo con potentes propiedades reductoras del estrés oxidativo celular descubierto por Eucerin. 19,50€

Nivea Sun Kids:

Nivea Sun Kids: Ofrece una protección fiable para los niños con piel sensible porque no contienen perfumes, colorantes ni conservantes. 6,60€

Avene Se trata de una emulsión y está indicada para pieles mixtas y grasas. El factor de protección que tiene es 50+. 14,90€

Isdin Extrem Pediatrics: Gel-crema tacto ligero no graso: protección para pieles sensibles, con un excipiente válido para todo tipo de pieles, incluso las grasas. 23,00€