Básicamente, hay tres parámetros para evaluar la calidad del semen: la concentración espermática, la movilidad de los espermatozoides y la morfología de los mismos. Además, las cadenas de ADN de los espermatozoides deben permanecer indemnes para conservar la capacidad fecundante de éstos.

El deterioro de estos parámetros se ha relacionado con factores ambientales y factores ocupacionales, como la exposición a tóxicos, así como con el estrés y el estilo de vida, y por supuesto, con la alimentación. Son muchos los estudios que asocian desde hace tiempo los factores nutricionales con la infertilidad del varón.

Los antioxidantes, microelementos y vitaminas, tiene un papel crucial en la producción de enzimas y en la síntesis de ADN, en el desarrollo testicular y en el proceso de maduración espermática, siendo por tanto la ingesta baja de antioxidantes y vitaminas una causa importante de infertilidad.

La existencia de abundantes lesiones en las cadenas de ADN de los espermatozoides (situación conocida como alta fragmentación del ADN espermático) puede generar embriones con material genético dañado, pudiendo dificultar su implantación u ocasionar abortos.

La suplementación con vitaminas parece mejorar la capacidad antioxidante del semen y reducir el daño en el ADN, mejorando la concentración, la motilidad y la morfología de los espermatozoides, y en consecuencia, el pronóstico reproductivo de muchas parejas así como los casos con abortos de repetición previos.

Los antioxidantes son por tanto moléculas que disminuyen el proceso oxidativo que envejece las células, mejorando la calidad del semen. Éstos son principalmente: Vitamina C y Vitamina E. Las concentraciones de vitamina C en el plasma seminal están relacionadas con el porcentaje de espermatozoides morfológicamente normales.

Ácido fólico. Vitamina esencial para la síntesis de ADN, su deficiencia incrementa la fragmentación de las cadenas de ADN.

Zinc y Selenio. La deficiencia de Zinc se asocia con aumento de lesiones en las cadenas del ADN espermático, y su suplementación en la dieta mejora la calidad espermática disminuyendo la concentración de anticuerpos antiespermatozoides en el semen y la fragmentación del ADN. La deficiencia de Selenio en la dieta puede ocasionar mayor número de espermatozoides inmóviles y anormales.

L-Carnitina, L-Acetil Carnitina, Coenzima Q10. Estos antioxidantes están presentes principalmente en las frutas y las verduras. Algunos de los alimentos que los contienen son: Frutas (aguacates, arándanos, cerezas, ciruelas, cítricos, frambuesas, fresas, kiwis, manzanas, papayas, piñas, uvas), verduras (ajo, berros, brócoli, calabaza, cebolla,

coles, espinacas, lechuga, pimientos, puerros, tomates, zanahoria), legumbres (garbanzos, guisantes, lentejas, maíz), frutos

secos (nueces) y aceites vegetales (cereales, lácteos desnatados y pescados).

Actualmente en España son varios los polivitamínicos comercializados para obtener un efecto beneficioso sobre la calidad espermática. Sin embargo, no todos contienen todos los antioxidantes anteriormente señalados, y a veces, muchos de ellos contienen dosis infraterapéuticas o insuficientes en relación a las dosis diarias recomendadas en los estudios realizados, y es que no es tarea fácil alcanzar la concentración adecuada de todos los componentes en un mismo producto.

De cualquier modo, lo importante es una dieta saludable, rica en frutas y verduras, y si ésta es escasa, suplementarla con polivitamínicos, puesto que se desconoce por el momento las diferencias entre tomar vitaminas en la dieta de forma natural o mediante suplementos.

Así, como la mujer debería empezar a tomar suplementos de ácido fólico y yodo ante la búsqueda de un embarazo, los hombres también tendrían que empezar a prestar atención a su alimentación, incluso con suplementos vitamínicos, al menos tres meses antes de intentar el embarazo para mejorar la calidad de sus espermatozoides.

Utilizando un polivitamínico que reúna los antioxidantes adecuados, se pueden aumentar las probabilidades de un embarazo evolutivo, ya sea espontáneamente, o bien mediante tratamientos de reproducción asistida.