Emilio Rodríguez es neurofisiólogo de la Unidad del Sueño en el Complejo Hospitalario Universitario de

Vigo (Chuvi). Desde ella, observa cómo afecta la alteración en el sueño a la biología humana.

-¿Cree que sería conveniente tener la misma hora que Portugal?

-El cambio que proponen es lógico porque estaríamos en el huso horario que nos corresponde; tenemos casi una hora de diferencia respecto al huso de Greenwich. Ese es el huso horario en el que tendríamos que estar. El cambio de horario se debió a una decisión política para hacer coincidir nuestra hora con la de Berlín en tiempos de Franco. Ahora, tenemos la misma hora que Polonia. El sueño de una persona tiene que ver con la liberación de hormonas y la influencia de la luz solar. Cuando nos vamos a la cama, nos vamos antes de lo que nos tendríamos que ir. Tendríamos que acostarnos después que los polacos y a la misma hora que los ingleses. Estaría más de acuerdo con nuestro sistema hormonal para producir sueño y al revés para despertarnos. El cambio de hora supondría ponernos al nivel de nuestro patrón biológico. Nuestro descanso sería mejor y estaríamos más despejados por la mañana.

-Algún especialista ha llegado a asegurar que los españoles duermen unos 50 minutos menos que la media europea.

-No se debe exactamente a la hora diferente, sino que son costumbres sociales por nuestro hábito de trabajo. Eso es lo que nos lleva a dormir menos, a no cuidar el sueño, al contrario de otros puntos de Europa. Cuando viajo a Italia me encuentro mejor porque me encuentro en mi huso horario. Nosotros vamos siempre un poco retrasados. Modificar la hora sería un cambio muy positivo que deberíamos hacer cuanto antes. Realmente, deberíamos seguir el huso horario de Portugal y el Reino Unido.

-Antes hablaba de estar más despejados por la mañana, al levantarnos...

-Sí, tendríamos menos estrés y nuestra vida sería más ecológica. Estaría más de acuerdo con nuestra biología.

-El cambio sería incluso mejor para los niños.

-En los niños, desde luego, porque sincronizarían mejor su sistema biológico.

-Usted no es experto en nutrición pero, muchas veces, se vincula sueño, comida y bienestar.

-La comida es un tema social. Con el cambio, comeríamos a la una de la tarde. En España, cuando

yo era niño, ya comíamos antes. Nuestras hormonas saldrían a la hora que tienen que salir. Nuestra vida hormonal está desajustada por un horario que no debe ser. Para polacos y alemanes, es perfecto; pero para nosotros está muy mal. El cambio de hora sería lo más acorde a lo que tiene que ser. No nos va a cambiar la vida, no va a disminuir el paro, pero sí podría contribuir a que viviésemos un poco mejor.