La Comisión Europea (CE) consideró este martes "desafortunado" que el gigante de internet Google haya decidido aplicar desde este jueves, tal y como había anunciado, su nueva política de privacidad, a pesar de la advertencia de Bruselas y las autoridades francesas de que no la consideran compatible con la ley de la UE.

"Es desafortunado que Google haya seguido adelante con su nueva política antes de responder a las preocupaciones de la autoridad francesa de protección de datos", declaró en un comunicado difundido hoy la vicepresidenta de la CE y responsable de Justicia, Viviane Reding.

La comisaria confirmó su respaldo a la petición de la autoridad de protección de datos de Francia de que Google retrasase su nueva política de privacidad, hasta que las dudas sobre si se ajusta a la legislación europea hubieran sido resueltas.

Según Reding, todas las compañías que ofrecen servicios a los consumidores Europeos deben proporcionarles "información clara" sobre su política de privacidad.

"En Europa, los consumidores deben poder tomar decisiones informadas sobre los servicios basados en internet que utilizan", señaló la comisaria.

Fuentes comunitarias explicaron que la autoridad francesa expresó a Google a través de una carta sus "serias dudas" de que su nueva política de privacidad fuera conforme a la legislación europea; en concreto, a la directiva sobre protección de datos de 1995.

En la misiva, a la que tuvo acceso Efe, piden además a Google que responda a esas dudas, ya que si vulnera las normas europeas puede enfrentarse a sanciones.

En ese caso, la aplicación de la legislación europea de protección de datos está "descentralizada", de forma que corresponde a las autoridades nacionales competentes verificar que las compañías cumplen con la ley y no a la Comisión Europea emprender acciones contra las empresas, agregaron las fuentes.

En el caso de Google, la autoridad francesa centra su preocupación en la decisión de la firma de combinar la información personal que tiene de los usuarios de sus diferentes servicios (buscador, correo electrónico, YouTube, etc.), y cuestiona la "legalidad" de ese procedimiento y si es "justo" para los consumidores.

Hace dos días, Reding ya había advertido a Google de que debía "dejar en suspenso" su nueva política hasta que se atuviese totalmente a la legislación europea de protección de datos.

"Como ya estableció la nueva legislación comunitaria del pasado 25 de enero, las compañías deben garantizar que sus Googl estén escritas en un lenguaje claro y comprensible y que los consumidores estén bien informados de las reglas", indicó entonces.