Así lo vivió la afición

En el Carpena sí se celebran títulos

El pabellón malagueño vibró hasta el final con el triunfo del Unicaja en Belgrado y la consecución de la BCL

Allá por febrero del presente 2024, en Málaga se instauró el pensamiento unánime de que el Unicaja era incapaz de alzarse con un título en casa. Y, aunque fue en Belgrado donde el Unicaja conquistó la Basketball Champions League, cualquiera que pasease por las inmediaciones del Martín Carpena pudo pensar que se trataba del epicentro de la Final Four continental. Los más de 4.000 cajistas que se congregaron en el pabellón malagueño vibraron con la final entre Lenovo Tenerife y Unicaja, desatando la locura durante ciertos tramos que bien pudieron haber supuesto un pequeño sismo en la capital de la Costa del Sol.

El ambiente era el propio de una gran cita. Para ello, el club había abierto no solo una de las tribunas, sino que también la mitad de cada fondo. El Unicaja arrancó imponiendo su ritmo frenético que tan bien le sienta tanto al equipo como al Palacio de los Deportes. Los triples de Nihad Djedovic y el sensacional mate de Tyson Carter sirvieron para poner tierra de por medio en el marcador y, en especial, para hacer entrar en estado de ebullición al Carpena.

Los presentes hacían retumbar el suelo de la bancada baja como si sirviese de aliciente para intimidar a los tinerfeños en sus posesiones. La fiesta se mantuvo vigente y fue alcanzando picos, como el provocado por Kendrick Perry cuando, a falta de seis minutos, anotó un triple, robó y sumó dos más mediante bandeja para diluir el peligroso parcial de Tenerife. Ya a falta de cinco minutos y con el +9 en el marcador, los más insolentes miraban al techo del pabellón fantaseando con el encaje de la nueva lona verde de campeón de la Basketball Champions League 2024.

Los rebotes defensivos, recuperaciones y tiros libres fallidos de los de Vidorreta se convirtieron en argumento de fiesta mayor. El Carpena ya se lo empezaba a creer. Aunque siempre creyó. Quizá es que lo empezaba a asumir. Lo atípico ya parecía cotidiano, como ver a Will Thomas subir la bola como si de un joven base se tratara. Y tras ello, su mate. Y tras ello, el "Will, Will, Will, Will" que siempre acompaña al de Baltimore.

Así se ha vivido en el Carpena la victoria del Unicaja en la BCL en Belgrado

Así se ha vivido en el Carpena la victoria del Unicaja en la BCL en Belgrado / Gregorio Marrero

Aun así, a falta de 13 segundos y tan solo tres arriba, quedaba tela por cortar. El Unicaja gestionó con solvencia su posesión y Alberto Díaz, capitán y MVP de la última final europea que ganó el club, anotó sus dos tiros libres. Y se desencadenó la histeria. La marea verde y morada que inundó el Carpena agujereó por enésima vez el techo del pabellón. Porque el Unicaja no ha ganado un título en el Martín Carpena. Pero el Martín Carpena ha vuelto a celebrar un título.