En el último pleno parlamentario, el presidente de la Junta, José Antonio Griñán abrió la puerta a especulaciones sobre las posibilidades de reformar la ley electoral para aumentar el número de escaños en la Cámara andaluza cuando respondió a esta petición histórica de IU, siempre obviada, mostrándose dispuesto a abordarla en el debate sobre el estado de la comunidad.

Durante semanas la bola creció. La Junta decía que el debate estaba sobre la mesa,el PSOE lo negaba y coincidía con el PP en que no era el momento e IU rescataba su propuesta de ampliar de 109 a 135 los parlamentarios y compensar el coste bajando el sueldo a todos un 20%. De fondo, estaba la reivindicación del 15-M por una democracia más participativa.

El temor a que la propuesta se interpretara como un aumento de cargos en época de crisis y la falta de consenso para reformar la ley electoral y redistribuir los votos sin aumentar los escaños apagó el tema. Pero Griñán afronta hoy el debate tras la debacle electoral del 22-M y con el clima social revuelto protagonizado por los indignados, a los que quiere hacer un guiño. Por ello, hoy propondrá crear en la Cámara el «escaño 110» para que los promotores de iniciativas legislativas populares puedan defenderlas participando en su debate en pleno y comisión (sin voto).

Además, quiere rebajar las firmas necesarias para presentar estas iniciativas de las 75.000 actuales a 41.000, que es el número medio de votos que cuesta cada escaño. Curiosamente, el líder del PP-A, Javier Arenas, hizo el lunes la misma propuesta, por lo que los populares tildaron de «patético» que Griñán les «copie».

Iniciativas legislativas populares. El 15-M en Málaga también registró hace un mes una iniciativa al respecto, aunque su petición es que basten 10.000 firmas. Precisamente, ésta es la última Iniciativa Legislativa Popular (ILP) registrada en la Cámara andaluza, aunque está pendiente de ser estudiada por la Mesa del Parlamento para admitirla a trámite.

Desde el inicio de la democracia, o más bien desde la ley de 1988 que regula estas iniciativas –y que tendrá que ser modificada, al igual que el Reglamento de la Cámara, que requiere para ello mayoría absoluta– se han presentado en el Parlamento andaluz 25 ILP, aunque con escaso éxito. Por no reunir las firmas suficientes (como ocurrió con la antitaurina) o incumplir otros requisitos, solo dos han llegado a debatirse. Más de la mitad fueron presentadas por ayuntamientos (todas relativas al fondo de cooperación municipal), que también pueden hacerlo si se unen 35. La propuesta del PP incluía también reducirlo a 20.

La iniciativa que Griñán lanzará hoy fue avanzada ayer por la consejera de Presidencia, Mar Moreno quien, aunque evitó nombrar al 15-M, reconoció que la idea, pionera en España, responde a propuestas de plena actualidad escuchadas en las últimas semanas y demuestra «que el presidente de la Junta sabe escuchar a la ciudadanía».

Moreno puso en valor que Andalucía está a la «vanguardia democrática» con medidas como el nombramiento del presidente de la RTVA por el Parlamento, la publicación de los bienes de los diputados o el «duro» régimen de incompatibilidades de los cargos públicos.

Pero Griñán quiere dar «nuevos pasos». Es, según Moreno, un ejemplo del tono que tendrá su discurso en un debate que «será tremendamente útil para la sociedad» y demostrará que el presidente «sabe escuchar y va a hacer propuestas», sobre todo de reactivación del empleo y de apoyo a empresas y familias.

El CPFF se presenta en julio. De momento, la Junta ha avanzado algunas de estas propuestas, como las becas de 400 euros para recuperar a jóvenes parados que abandonaron la escuela, pero el margen de maniobra es escaso para todas aquellas que requieran financiación.

Las arcas públicas están temblando y ayer Zapatero, anunció en el debate sobre el estado de la nación que el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) de julio estudiará imponer una regla de gasto para las comunidades ante la «incertidumbre» generada por los datos del déficit autonómico del primer trimestre del año.

Tanto el Banco de España como la UE han pedido reiteradamente al Gobierno fijar un techo de gasto para las comunidades, y aunque el Ejecutivo central inicialmente se negó, Zapatero dejó ayer la puerta abierta. La Junta no quiso valorar su propuesta y emplazó a la intervención de Griñán hoy en el Parlamento. Precisamente, Andalucía tiene que presentar en el CPFF de julio su plan de reequilibrio para cumplir con el objetivo de no superar este año el déficit del 1,3% del PIB. En el primer trimestre acumuló un 0,75%, que la Junta atribuyó a adelantos de pagos.

Andalucía siempre ha defendido su compromiso con la estabilidad presupuestaria pero también un trato diferenciado para las comunidades menos endeudadas, que nunca ha logrado. Al albur del plan de estabilidad impuesto ya el año pasado, el debate sobre el estado de la comunidad de 2010 se centró en los recortes y nuevos impuestos andaluces. De recortes la Junta nada ha dicho aún y ha negado los rumores sobre la fusión de consejerías (como Empleo y Economía) para reducir el organigrama, que también reclama el PP.