Un grupo de empleados del Ayuntamiento de Jerez de la Frontera (Cádiz), afiliados al sindicato CGT, bloqueó ayer desde primera hora de la mañana al edificio principal del ente público para protestar por el expediente de regulación de empleo (ERE) anunciado por el gobierno local del PP. El consistorio aprobará hoy el despido progresivo de 390 empleados municipales, que se hará efectivo en mayo. Jerez es uno de los ayuntamientos más endeudados de Andalucía, y el primero que recurre a un recorte drástico de plantilla para poder recibir la ayuda del Gobierno para pagar a sus proveedores.

En declaraciones a los periodistas, Nieves Calvillo, de CGT y presidenta del comité de empresa, advirtió que los trabajadores «están muy asustados y muy afectados». «Teníamos la esperanza de que la situación económica del Ayuntamiento se solucionara de otra manera», dijo.