Málaga acogerá este año el acto central del Primero de Mayo, que tiene como principal argumento el rechazo a la reforma laboral y en general a la política económica del gobierno del PP, informaron ayer los secretarios en Andalucía de UGT, Manuel Pastrana, y de CCOO, Francisco Carbonero.

CCOO y UGT retomarán el próximo domingo las movilizaciones para mantener vivo el rechazo a la reforma y a los recortes en el estado del bienestar y han advertido de que en los próximos meses se avecina un «período de intensa conflictividad social» en la calle y en las empresas. Los actos del próximo domingo se llevarán a cabo en las ocho capitales de provincia de Andalucía y serán de diversa índole, aunque no consistirán en manifestaciones, que se reservan para el Primero de Mayo.

Así, Pastrana censuró el «ejercicio de sordera y de autismo» del Gobierno ante las movilizaciones de rechazo a la reforma del mercado de trabajo y afirmó que ante la postura del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de «estar escondido y no dar la cara sólo cabe seguir con las movilizaciones y confrontar en la calle» la política del Ejecutivo central.

Por ello, advirtió de que en los próximos meses se avecina un «período de intensa conflictividad» social que se desarrollará de forma alternativa en la calle y en las empresas porque las empresas que apliquen la reforma laboral sin negociación o sin respetar los derechos de los trabajadores «se verán invadidas por un proceso de conflictividad y de tensión», en palabras de Manuel Pastrana.

El dirigente de CCOO llamó a los trabajadores a que secundan las movilizaciones contra los «anuncios de recorte del Gobierno, que ahondan más en la política de ruina que desarrolla el PP desde que llegó al Gobierno hace cuatro meses».

Además, lamentó la «pésima imagen de España» que están dando el PP y el Gobierno al crear dudas sobre la credibilidad de las cuentas de

las comunidades.