El sindicato CSIF denunció ayer que el Servicio Andaluz de Salud (SAS) ha comenzado a aplicar ya los recortes en las retribuciones de los empleados de la sanidad pública andaluza, sin aguardar al resultado de la negociación abierta con los sindicatos para el plan de ajuste.

Así, censura que en la nómina que se ha cobrado a final de mayo no se les ha abonado a los trabajadores del SAS la productividad correspondiente al 2011 «viendo aminoradas sus retribuciones y vulnerados sus derechos adquiridos». En opinión, este impago incumple el anuncio realizado por varios miembros del Gobierno andaluz de que la negociación con los sindicatos para aplicar el plan de ajuste se aplazaba para mantener la interlocución con los sindicatos. Para la CSIF, el impago de la productividad del 2011 «tiene una incidencia particularmente negativa ya que, al tratarse de un concepto que se abona con carácter anual a final de mayo, la mayoría de los trabajadores hacen sus previsiones de gasto».

Por su parte desde el PP denunciaron que la Junta ha dejado de ejecutar 2.142 millones que tenía presupuestados en Salud.