Informe de IVIE

La pobreza en Andalucía crece un 16% con la crisis, el doble de la media nacional

La andaluza se encuentra entre las comunidades que más se han empobrecido, sólo por detrás de Canarias y Valencia

Un hombre rebusca en el interior de un contenedor.

Un hombre rebusca en el interior de un contenedor. / Reuters

EUROPA PRESS

Los niveles de pobreza en España han aumentado un 8% desde el inicio de la crisis, entre 2006 y 2011, siendo el desarrollo humano un 4,4% menor que si no hubiera habido recesión. Sin embargo, la diversidad entre comunidades autónomas en cuanto a las cifras de pobreza y desigualdad se ha acentuado hasta llegar incluso a duplicarse. En el caso de Andalucía, el índice de pobreza ha crecido un 16%.

Así se desprende del informe «Desarrollo humano y pobreza en España y sus comunidades autónomas» elaborado por el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE) y la Fundación Bancaja, que fue presentado ayer por sus autores.

El estudio recoge el nivel de desarrollo humano, un 4,4% menor que si no hubiera estallado la crisis, y el bienestar material, que se ha visto duramente afectado con una caída del 13,7% para el conjunto de España.

Además, aunque el impacto sobre los índices de educación y salud se ha atenuado, y en el período analizado no se han visto influidos, los expertos advierten de que, de prolongarse la actual situación económica, también podrían verse afectados, como ya ha sucedido en Grecia y Rusia.

Las comunidades más afectadas son Canarias (21%), la Comunidad Valenciana (18%) y Andalucía (16%), cuyo índice de pobreza duplica incluso la media nacional. En cambio, las comunidades con los mejores datos son Navarra (-9%), País Vasco (-2%) y Madrid (4%).

Por otra parte, regiones como Castilla y León, Galicia, Madrid, Cataluña y País Vasco han disminuido la desigualdad frente a las demás, y el desarrollo humano ha caído respecto a un escenario sin recesión. De no haber crisis, este índice habría sido un 4,4% mayor para el conjunto de España, siendo Andalucía donde la caída ha sido mayor (6,4%) y Cataluña donde ha sido menor (2,7%). En cualquier caso, se observa una «inercia» en la posición de las autonomías y la ordenación prácticamente no cambia a lo largo del tiempo.

El informe -que se basa en variables de bienestar material, educación y salud- muestra cómo los primeros años de la crisis han afectado fundamentalmente al bienestar material, calculado a partir de la renta, que se resiente con una caída del 13,7% de media estatal, con picos en Andalucía (20,4%) y Cataluña (8,4%).

En este punto, los expertos quisieron puntualizar las diferencias entre la percepción y los datos, ya que, comparativamente, las cifras arrojan resultados algo mejores que en los años anteriores a 2006. En los años del «boom», las rentas se incrementaron rápidamente y es a partir de 2008 cuando se produce una caída importante.

Por el momento, los otros dos índices utilizados en el cálculo del desarrollo humano (salud y educación) no se han visto alterados. De hecho, una primera reacción al desempleo fue el aumento de los índices de matriculación, lo que ha mejorado la variable educativa, ya que ante la dificultad de encontrar empleo se opta por seguir estudiando.

«Pero la variable de salud se verá afectada si el sistema sanitario público sufre un deterioro importante y la pobreza se extiende», alerta el informe. «Si el período de crisis se prolonga la tendencia previsible es de un mayor deterioro del bienestar material, un ligero deterioro de la variable de salud y un ligero repunte en educación». Un escenario que dibuja el fuerte crecimiento de la tasa de parados de larga duración, que según datos de este mismo año, «se ha multiplicado por siete entre 2006 y 2013» y «la situación empieza a ser muy seria».

Ante esta situación, se están llevando a cabo «recortes indiscriminados», criticaron los expertos. A su entender, «esto está retrasando la salida de la crisis porque no podemos mantenerlo todo con menos dinero».

Los expertos quisieron destacar el entorno estable de la estructura social y familiar en España, «que está haciendo que se soporte mejor la crisis». El núcleo familiar se comporta en este país como «un verdadero grupo supliendo las carencias y evitando una mayor conflictividad social», resaltaron.

Tracking Pixel Contents