El presidente del Gobierno andaluz, José Antonio Griñán, ha dicho que no ha dado directrices sobre los ERE a través de WhatsApp al diputado socialista Antonio Miguel Carmona, pero que "no tendría ninguna extrañeza que se hiciera" si un militante lo "cree conveniente para ofrecer la posición del PSOE".

Griñán, que ha asistido hoy al acto de presentación de la memoria de 2012 del Consejo Consultivo de Andalucía, con sede en Granada, se ha pronunciado así al ser preguntado sobre las declaraciones del diputado del PSOE en la Asamblea de Madrid, que dijo que cuando habla de los ERE de Andalucía está "teledirigido" por el dirigente andaluz, también secretario general de los socialistas andaluces.

El presidente de la Junta, que ha dicho que "por primera vez" le preguntan los periodistas al respecto, ha asegurado que no lo ha hecho. "No lo he hecho, pero no tendría ninguna extrañeza que se hiciera porque estoy hablando de un militante socialista, que habla dentro del PSOE con quien cree conveniente para ofrecer la posición del PSOE", ha manifestado.

Griñán, que ha eludido pronunciarse sobre la excarcelación ayer del ex director general de Trabajo de la Junta de Andalucía, Francisco Javier Guerrero, uno de los principales imputados por el caso de los ERE falsos, ha dicho que si fuera verdad que parte del dinero de los Expedientes de Regulación de Empleo se destinó a gastos de manifestaciones de UGT y CCOO le parecería "mal".

"¿Cómo voy a tener constancia de eso?", ha respondido a la pregunta de si conoció ese supuesto desvío.

Sobre lo publicado hoy en el diario El Mundo, donde Juan Francisco Algarín Lamela, supuesto intermediario en las comisiones de los ERE por orden de Juan Lanzas, dice que le llevó cuatro millones de euros en sobres a los bares, Griñán se ha limitado a decir que si fuera verdad le parecería "una barbaridad"