­La vicesecretaria de Economía y Empleo del PP-A y presidenta del comité organizador del XIV congreso regional que se celebrará los próximos 1 y 2 de marzo en Sevilla, Carolina España, criticó ayer las «intoxicaciones» que se están haciendo «desde el exterior» y que apuntan a un «dedazo» en la elección del nuevo líder del partido.

En rueda de prensa, España defendió que esta cita, en la que se designará al nuevo presidente del PP-A y candidato a las próximas elecciones autonómicas, es un proceso «absolutamente abierto, democrático, transparente y participativo» en el que todo aquel militante que lo desee, que esté al día en el pago de sus cuotas y que cuente con el aval de 90 compañeros, puede optar a ser precandidato.

«Aquí no hay dedazo. El que quiera hablar de dedazo que mire en sus propias filas», insistió. Preguntada acerca de a quién se refiere cuando habla de intoxicaciones «desde el exterior» aseguró que se refería al PSOE-A.

Y es que la presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, volvió a asumir ayer el papel de «azote» del partido al reclamar que sean los militantes, con su opinión, los que elijan al líder del PP andaluz y que éste no sea elegido porque «le toque el dedo divino». En declaraciones a esRadio, Aguirre abogó por esta fórmula dado que «no lo ha querido hacer» el presidente del PP, Mariano Rajoy, «porque iría en contra de la Constitución que dice que los partidos deben ser democráticos».

Preguntada por la situación en el PP de Andalucía, destacó que «el problema es el recuerdo» que tiene Javier Arenas «de los congresos de la UCD», e insistió en que si en Andalucía «fueran valientes», como lo han sido en Baleares y Galicia con José Ramón Bauzá y Alberto Núñez Feijoó, «permitirían que se presentaran aquellos que aspiren a líderes ante los militantes».

«Lo que tiene que suceder en Andalucía es permitir que opinen los militantes. ¿A una militancia tan baqueteada, cómo no le vamos a dar el derecho que le dan los estatutos para votar al líder que se quiera? El de Bauzá fue un ejemplo, a pesar de estar en contra todo el mundo», reseñó. Por ello, criticó que Arenas «se empeñe en que haya un solo candidato, por los recuerdos que tiene de los congresos de la UCD». «Y está equivocado», sentenció.

Esta polémica, unida al hecho de que se haya convocado un congreso para elegir al candidato, «demuestra que en el PP están muy divididos y que no hay cohesión interna en el partido», afirmó ayer el secretario de Organización del PSOE-A, Juan Cornejo.

El candidato que resulte elegido deberá obtener el apoyo de al menos 315 de los 1.576 compromisarios que acudirán al congreso. De las delegaciones provinciales, habrá 204 de Almería, 180 de Cádiz, 137 de Córdoba, 225 de Granada, 139 de Huelva, 180 de Jaén, 290 de Málaga y 211 de Sevilla. Para ser precandidato, además, habrá que obtener un mínimo de 90 avales.