El pleno del Parlamento andaluz rechazó ayer, con los votos en contra del PSOE-A, Podemos e IU, y el apoyo del PP-A y de Ciudadanos (C´s), la toma en consideración y consiguiente tramitación de la proposición de ley para la supresión del impuesto de donaciones y sucesiones presentada por el grupo popular.

En defensa de la proposición de ley, el presidente del PP-A y del grupo parlamentario, Juanma Moreno, comenzó su intervención criticando que el PSOE-A y C´s hayan tenido «secuestrado» el debate de esta propuesta de ley que ha tardado «cien días» en llegar al pleno, lo que pone de manifiesto, a su juicio, «una falta de respeto hacia la pluralidad democrática y la libertad de expresión de los grupos».

Sobre la proposición de ley para la supresión del impuesto de donaciones y sucesiones, Moreno explicó que persigue reducir de manera responsable, progresiva y gradual, la tributación que los andaluces soportan por este impuesto para hacerlo equiparable a otras comunidades. Además, explicó que tras esta iniciativa, su grupo presentará otras para lograr una «reforma integral desde el punto de vista fiscal que tanta falta le hace a nuestra tierra».

Moreno detalló que la consecuencia directa de este impuesto ha provocado que, en 2009, Andalucía sea la comunidad autónoma en la que más han aumentado las renuncias a las herencias, situación, para el PP-A, «grave y triste». Así, cifró en 6.000 las familias que en 2014 tuvieron que renunciar a algo «tan preciado, no solo en lo material, sino en lo afectivo y emocional, como es una herencia».

De hecho, La Opinión de Málaga publicó el pasado 11 de octubre que en 2014 unos 1.060 malagueños no pudieron normalizar su herencia y que desde el año 2009, las renuncias se han elevado en la provincia en un 170 por ciento.

Por todo, el PP-A propone una disminución progresiva del impuesto de donaciones y sucesiones con bonificaciones graduales en tres años, con un 33 por ciento en 2016, un 66 por ciento en 2017, y un 99 en 2018.

Asimismo, merced de esta proposición de ley, los populares quieren que Andalucía tenga las mismas ventajas fiscales que otras tierras de España, y ha puesto como ejemplo los casos de Madrid, Galicia, Castilla la Mancha o Baleares. «¿Por qué los andaluces tenemos que pagar más que el resto de los españoles?, ¿por qué se nos condena a una injusticia palmaria y evidente como es este impuesto?», se preguntó Moreno Bonilla durante su intervención.