El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha fijado para los días 30 y 31 de enero y 1 de febrero el juicio contra el ex consejero de Educación, Cultura y Deporte Luciano Alonso, para quien la Fiscalía pide 14 años de inhabilitación para empleo o cargo público a cuenta de un presunto delito continuado de prevaricación administrativa en relación a los nombramientos de Luis Guerrero Jiménez como director del Centro Andaluz del Flamenco (CAF) y de Alejandro J. Cárdenas y María Centeno como directores consecutivos de la Filmoteca de Andalucía.

En este sentido, fuentes del Alto Tribunal Andaluz han informado a Europa Press de que está previsto que el día 30 de enero declare el acusado y seis testigos propuestos por el Ministerio Fiscal, mientras que el día 31 de enero declararán otros seis testigos propuestos también por la Fiscalía y tres propuestos por la defensa, tras lo que tendrá lugar la prueba documental.

Ya el 1 de febrero, tendrán lugar las conclusiones y los informes de las partes, todo ello en un juicio que se celebrará en la Sala Civil y Penal, con sede en Granada, y que estará presidido por el presidente del TSJA, Lorenzo del Río, junto con el magistrado de la Sala Civil y Penal, Juan Ruiz-Rico, así como la magistrada de la Sala Contencioso-Administrativo del TSJA que por turno le corresponda. Todas las sesiones comenzarán a las 10,00 horas.

La Fiscalía Superior de Andalucía ha solicitado 14 años de inhabilitación especial para empleo o cargo público para el ex consejero y actual parlamentario socialista andaluz, que, por su parte, ha pedido su libre absolución y ha negado que firmara los tres nombramientos investigados con el objetivo de "beneficiar a personas del PSOE".

La acusación de la Fiscalía. En su escrito de acusación, al que ha tenido acceso Europa Press, el Ministerio Público relata que, tras ser nombrado consejero, el acusado habría "utilizado las facultades que dicho cargo le confería para beneficiar a personas relacionadas con el PSOE con puestos de libre designación y naturaleza eventual".

Y todo ello, según la Fiscalía, "a sabiendas de la absoluta falta de idoneidad de los nombrados para el desempeño de las funciones que dichos puestos tenían asignadas legalmente, así como que, a pesar de percibir los ingresos previstos presupuestariamente para ellos, no las desempeñarían en modo alguno".

En primer lugar, el Ministerio Público analiza el nombramiento de Luis Guerrero, "destacado militante del PSOE de Málaga y miembro de su Ejecutiva Provincial", como director del Centro Andaluz de Documentación del Flamenco, y señala que fue en julio de 2012 cuando el acusado le ofreció la posibilidad de incorporarse a la Consejería de Cultura y Deporte para desempeñar funciones relacionadas con dicha Consejería en la ciudad de Málaga.

En este sentido, y como quiera que el organigrama administrativo de la Consejería del ramo "no contempla la existencia de un puesto de trabajo de esta naturaleza y cometidos", el ex consejero "decidió utilizar" el de director del CAF que se acababa de dejar vacante al no renovar en el cargo a su anterior titular.

No visitó la sede oficial del CAF. Una vez aceptado dicho ofrecimiento, Luis Guerrero renunció al puesto de coordinador del Grupo Socialista en la Diputación de Málaga que hasta ese momento desempeñaba, siendo "inmediatamente" nombrado director del CAF por Luciano Alonso mediante dos órdenes distintas, la última de las cuales estuvo vigente hasta el 16 de junio de 2015, cuando se produjo el cese a petición propia de Guerrero.

El fiscal relata que, "tal y como desde un primer momento acordaron el acusado y Luis Guerrero, durante todo el tiempo en que éste último ocupó el puesto de director del Centro Andaluz de Documentación del Flamenco no desempeñó ninguna de las funciones" que eran inherentes al cargo.

A ello se suma que, "durante los casi tres años que Luis Guerrero percibió el sueldo presupuestariamente asignado al puesto, continuó residiendo en la ciudad de Málaga y ni siquiera visitó la sede oficial" del CAF "que debía dirigir", ubicada en Jerez de la Frontera (Cádiz) y cuyos trabajadores "incluso desconocían que contaban con un director".

Hijo de la exalcaldesa de Jaén. En relación al nombramiento de Alejandro J. Cárdenas como director del Centro Andaluz de la Imagen o Filmoteca de Andalucía, el Ministerio Público afirma que, a raíz del cese de Mar Moreno como consejera de Educación el 9 de septiembre de 2013, se produjo también el de todos los miembros de su gabinete, entre los que se encontraba el propio Alejandro J. Cárdenas, "hijo de Carmen Peñalver, íntima amiga de la consejera y miembro destacado del PSOE de Jaén, del que fue secretaria general provincial, además de alcaldesa de Jaén y delegada de Asuntos Sociales de la Junta en esa provincia".

Al hilo de ello, el fiscal añade que, al perder su anterior empleo, el acusado decidió nombrar a Alejandro J. Cárdenas, que en ese momento contaba con 24 años y acababa de licenciarse en Derecho, director del Centro Andaluz de la Imagen "a sabiendas de que no iba a desempeñar ninguna de las funciones a éste encomendadas".

Luciano Alonso efectuó el nombramiento mediante una Orden de fecha 10 de septiembre de 2013, manteniéndose vigente hasta el 31 de diciembre de ese año, cuando Alejandro J. Cárdenas fue cesado por el acusado, señala el Ministerio Público, que agrega que, en este caso, el primero "era perfectamente consciente, porque así se lo habían advertido en la Consejería, de que no iba a desempeñar las funciones" propias del cargo.

El Centro Andaluz de la Imagen tenía su sede en Córdoba capital, lugar que Alejandro J. Cárdenas, siendo su director y "percibiendo el sueldo que a este cargo presupuestariamente correspondía, ni siquiera visitó".

"Totalmente desconocida". Una vez cesó a éste, Alonso "procedió inmediatamente a cubrir" el puesto de directora de la Filmoteca de Andalucía con el nombramiento de María Centeno, de 29 años de edad y que "es hija y sobrina de destacados dirigentes del PSOE de Málaga". El nombramiento se produjo por Orden de 1 de enero de 2014 y se mantuvo en vigor hasta el 17 de junio de 2015, cuando concluyó debido al cese del propio Luciano Alonso como consejero de Educación.

Como en el caso anterior, la Fiscalía asevera que a María Centeno "se le comunicó que, a pesar de ostentar el cargo de directora de la Filmoteca de Andalucía y percibir el sueldo que a este puesto correspondía, no iba a desempeñar función alguna relacionada con el mismo, razón por la cual, durante el más de año y medio en que ocupó dicho cargo ni siquiera visitó la sede que la Filmoteca tiene en Córdoba, donde era totalmente desconocida".