El Consejo de Gobierno ha autorizado a la Agencia Pública Andaluza de Educación para contratar, en régimen de concesión y por un importe total de 58,22 millones de euros, la renovación del servicio de comedor escolar en 551 centros docentes públicos de la comunidad. Los contratos, que beneficiarán a 59.165 alumnos de las ocho provincias, incluyen también el refuerzo de desayuno y merienda para garantizar tres comidas diarias al alumnado de familias en situaciones de exclusión social o riesgo de padecerla.

Alrededor de 1.900 colegios e institutos y más de 184.000 alumnos se benefician actualmente del servicio de comedor escolar. La prestación se ofrece a un precio público que se redujo el pasado año académico de 4,50 a 4,38 euros diarios. Casi el 75% de estos usuarios tiene algún tipo de bonificación en función de la renta, incluida la gratuidad total para la mitad, frente al 19,4% de hace ocho años. Además de las familias con mayores dificultades económicas, cuentan con exención del pago los alumnos que tienen que salir fuera de la localidad de residencia para asistir a su centro docente.

El servicio incluye la asistencia de personal especializado, con al menos un monitor por cada 15 comensales en Infantil de segundo ciclo, uno por cada 25 en Primaria, y uno por cada 35 en ESO. Los menús son supervisados cada mes y se ajustan a las recomendaciones de la Consejería de Salud y del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad en cuanto a los estándares de calidad y alimentación saludable.

Por su parte, el refuerzo de desayunos y meriendas se lleva a cabo a través del Plan Extraordinario de Solidaridad y Garantía Alimentaria, dirigido a hacer frente a las necesidades básicas de manutención de los colectivos más vulnerables. Desde su puesta en marcha hace cinco años, la iniciativa ha supuesto cerca de 100.000 usos por menores en situación de riesgo. Este año se benefician de la medida 24.609 alumnos.

Los comedores escolares se generalizaron a partir del año 2002 con el desarrollo de los planes de apoyo a las familias andaluzas y de ampliación de horarios de centros docentes. Su implantación comenzó en 730 centros y desde entonces se ha extendido, contribuyendo a mejorar los hábitos alimenticios y a prevenir problemas de salud.