Granada, junto a las localidades vecinas de Albolote, Maracena y Armilla, se ha sumado desde este mediodía a la red de más de 200 ciudades europeas con un sistema de transporte metropolitano, en el que la Junta ha invertido 558 millones de euros y que prevé transportar 11 millones de usuarios el primer año.

Una década después del inicio de las obras, la infraestructura con un trazado de dieciséis kilómetros -la mayoría en superficie- y que consta de veintitrés paradas y tres estaciones subterráneas ha entrado en servicio después de que el consejero de Fomento, Felipe López, haya participado en su último trayecto en pruebas.

Junto a los alcaldes de Albolote, Maracena, Granada capital y Armilla, López ha destacado que el nuevo Metro de Granada, junto al de Sevilla y Málaga, convierten a Andalucía en la comunidad con más ferrocarriles metropolitanos en aglomeraciones urbanas de España, donde viajarán para 2018 unos 33 millones de viajeros totales.

López ha calificado como "momento histórico" en el devenir de la ciudad la puesta en servicio de esta nueva infraestructura por suponer un "punto de inflexión" en el futuro de Granada y de su entorno metropolitano.

El alcalde de la capital granadina, Francisco Cuenca (PSOE), ha destacado que hoy Granada y su área metropolitana den "un salto a la modernidad", en el que quedan atrás "tiempos de bronca" y cambios de proyecto que han implicado retrasos, y ha dicho que sigue trabajando para tener un billete único y transbordos con otros transportes.

Gestionado por la Consejería de Fomento y Vivienda a través de la Agencia de Obra Pública y operado por Avanza y otras empresas, el metro ha generado casi 200 empleos directos y alcanzó durante la fase de ejecución de su construcción 1.100 trabajos más.

El nuevo sistema de transporte permite el acceso a los centros de interés social, económico y turístico de Granada y su área metropolitana, y se adentra en la ciudad en un recorrido norte-sur a través de áreas residenciales, grandes avenidas y zonas comerciales para mayor accesibilidad, ha subrayado la Consejería.

La duración del viaje se prevé en 22 minutos entre Albolote y La Caleta, parada más céntrica en la capital granadina, y otros 26 minutos desde ese punto hasta la parada término de Armilla, unos tiempos que se adquirirán en los primeros meses de explotación.

El recorrido incluye puntos de interés como los Hospitales Virgen de las Nieves, San Cecilio y PTS, distintas facultades de la Universidad, la zona deportiva del Nuevo Estadio de los Cármenes, el Palacio de los Deportes, el Parque Tecnológico y el Parque Comercial Nevada de Armilla.

El metro, que tendrá un coste por trayecto a partir de 0,82 céntimos de euro y que apuesta por un modelo de ciudad más sostenible, saludable y habitable, prevé retirar de la circulación casi tres millones de desplazamientos en vehículos al año, con una disminución de emisiones de CO2 de 3.234 toneladas.

Entre los avances y prestaciones que incorpora se encuentran la reducción de la contaminación acústica, un sistema de plataforma reservada, prioridad en regulación de semáforos, gestión del tráfico supervisada en tiempo real, paneles fotovoltaicos y placas térmicas y una tracción sin catenaria en determinados tramos.

La infraestructura ha incluido una de sus actuación singulares en la Estación Alcázar Genil que, manteniendo su capacidad funcional, integra los restos arqueológicos hallados durante las obras de construcción en el que el usuario podrá visitar un albercón almohade del siglo XIII.